El aislamiento siempre es un interesante punto de partida para contar una historia. Algunos directores lo volvieron parte fundamental de su obra, como John Carpenter. También están las películas de personajes atrapados en algún lugar, que deben luchar por salir. Enterrado, con Ryan Reynolds, y 127 horas, dirigida por Danny Boyle, son casos de las últimas décadas. Inside es la recién llegada a este subgénero claustrofóbico.
Willem Dafoe interpreta a Nemo, un experimentado ladrón que se mete en el departamento de un millonario. El plan es robar algunas piezas de sus colección de obras de arte -más precisamente, cinco pinturas originales de Egon Schiele- y huir rápido en un helicóptero desde donde alguien dirige el operativo. Cuando está culminando su faena delictiva, las alarmas se activan y todo el lugar queda blindado. El ladrón logra acallar los ruidos, pero pierde contacto con el helicóptero y no encuentra la manera inmediata de salir. Las ventanas ya no pueden ser abiertas. La puerta de entrada es como una bóveda.
Lo que sigue es un unipersonal de Dafoe disfrazado de historia de supervivencia. El astro da cátedra de su talento para hacer creíble cada una de las peripecias intimistas del antihéroe. Hay sufrimiento, sí: la temperatura puede variar de golpe y no hay demasiado para comer ni beber (aunque esos comestibles incluyen caviar). No cuenta con los recursos para cocinar con fuego ni agua corriente, lo que complica su situación a la hora de excretar los alimentos. Y a falta de agua potable, usa las regaderas del minijardín interno. Su único contacto con el mundo exterior es una paloma malherida del otro lado de un ventanal y las cámaras de seguridad de otros puntos de aquel edificio neoyorquino. Sin embargo, no pierde de vista el objetivo de escapar. Pone en práctica sus habilidades para manipular herramientas -y fabricar algunas no disponibles-, aún cuando su cordura empieza a decaer.
Las referencias a Robinson Crusoe, la novela de Daniel Defoe (vaya coincidencia fonética) no son caprichosas. Por el lado de la literatura, también linkea con la obra de J.G. Ballard. Sobre todo, con su etapa nihilista, que abarca textos como Crash y Rascacielos, donde se explora la relación de los individuos con entornos tecnológicos, y muestra cómo afloran los aspectos más salvajes de la naturaleza humana. El tercer acto, con sus elegantes habitaciones en ruinas, constituye una estupenda traducción de los paisajes ballardianos.
Gracias a la labor de Dafoe y la puesta en escena del director Vasilis Katsoupis, Inside es una experiencia angustiante y dinámica, que evita -por muy poco- volverse repetitiva y propone más de una lectura.
(Gracia, Estados Unidos, 2023)
Dirección: Vasilis Katsoupis. Guion: Ben Hopkins. Elenco: Willem Dafoe, Gene Bervoets, Eliza Stuyck. Producción: Giorgos Karnavas, Marcos Kantis, Dries Phlypo. Duración: 105 minutos.