SIN TON NI SON
El cine de Wes Anderson, incluída su devoción por la fábula, simetría y estética, se ha convertido en una parodia de sí mismo y se distancia notoriamente de Bottle Rocket y Rushmore, sus mejores films.
¿Qué quedó del cine indie de Wes Anderson apadrinado por los Coppola? Un tipo de cine que se aproxima a la autorreferencia, ya sin dirección o sentido alguno. Sabiendo que el lenguaje cinematográfico es vasto y que si bien utilizado permite la concatenación de escenas funcionales a una trama, Anderson -de vaga manera- repite planos y movimientos de cámara calcados con frecuencia, ejemplificados con: mantener en plano a un personaje principal (específicamente Korda/del Toro), que éste dialogue con un secundario a izquierda o derecha y que con el movimiento horizontal se deje fuera de plano al tercero, subsiguiente acción, diálogo de Korda con quien esté en el extremo contrario y el mismo movimiento horizontal pero en sentido opuesto deje fuera de plano al secundario que antes sí ocupaba ese lugar. Otra repetición es la de colocar una cámara giratoria en el medio de un set y direccionarla hacia un lado y otro, dejar fuera de plano a un personaje, escuchar un sonido que queda fuera de campo auditivo (una explosión, un golpe, etc.) y en el giro aparecer el mismo personaje ubicado en alguna situación que generó ese ruido. Algo similar pero sin impacto como fuera la recordada escena dentro del auto de Children of Men.
El esquema fenicio transcurre alrededor de 1950 y va de un tal Anatole Zsa-zsa Korda (Benicio del Toro), un industrial que casado tres veces, a su vez es padre de nueve hijos varones y una hija monja a quien quiere declarar como única heredera de su fortuna. Korda es víctima de numerosos atentados contra su persona (intentos de asesinato), desde el frecuente derribo al estar trasladándose por vía aérea, el envenenamiento de su comida y otras fracasadas acciones. Korda, tiene un proyecto magnánimo y es el de construir en Fenicia el “Korda Land and Sea Phoenician Infrastructure Scheme”, un mega proyecto para el cual, como buen negociador, debe entablar conversaciones comerciales con los contribuyentes/financistas del mismo, acordar porcentajes y conseguir la firma. Korda se mueve para los negocios de tal manera que es reconocido como el “negociador del 5%” en referencia a su habilidad para lograr que inversores aumenten su participación económica en este y otros proyectos. Es aquí donde, gracias a este variado set de inversores involucrados que se encontrará con un multicast actoral conformado por políticos, gobernadores, la mismísima figura del Vaticano, la futura esposa de Korda y mayor enemigo: su hermano (Nubar / Benedict Cumberbatch).
Los multicasts de Anderson recuerdan a aquellos tiempos (pre cancelación) en los que todo actor quería participar al menos en un film que dirigiese Woody Allen, esto brindaba reconocimiento y cierto prestigio, roles para los que los actores, como ovejas a las que refería Hitchcock bajaban notoriamente sus cachets. La diferencia recae en que el tiempo en escena de los participantes en las de Anderson es ínfimo, segundos o apenas minutos y son publicitados hasta en este nuevo tipo de posters publicitarios denominados “character teaser posters”, ejemplificados aquí por Bill Murray, Tom Hanks, Bryan Cranston, Michael Cera, o la grandiosa y desaprovechada Hope Davis. En los films de Allen, estos actores tenían un desarrollo de sus personajes.
Al no ser siempre placentero encontrarse con una película de Wes Anderson recomendamos seguir la cuenta de YouTube @curiousrefuge en la que a su vez parodian con IA al cine de Wes recreando trailers de películas como si estas hubieran sido filmadas por el propio Anderson, es así como se resalta la evidente utilización de gama de colores pasteles, la simetría, un plan a seguir, intertítulos y una impronta descaracterización de personajes, ni hablar de la conformación del multicast previamente mencionado e innecesario.
(Estados Unidos, Alemania, 2025)
Dirección: Wes Anderson. Guion: Wes Anderson, Roman Coppola. Elenco: Benicio del Toro, Steve Park, Willem Dafoe, F. Murray Abraham, Michael Cera, Tom Hanks, Bryan Cranston, Charlotte Gainsbourg, Mathieu Amalric, Jeffrey Right, Bill Murray, Hope Davis, Benedict Cumberbatch, Riz Ahmed, Scarlett Johansson. Producción: Wes Anderson, Jeremy Dawson, John Peet, Steven Rales. Duración: 101 minutos.