La segunda edición del festival Espanoramas: Muestra de Cine Español 2016 continúa su presentación en el cine Gaumont, y una de sus principales atracciones es la sección dedicada a lo más relevante del cine de terror español contemporáneo. Este ciclo reúne un seleccionado de los títulos que se destacaron a nivel internacional, y que marcaron un antes y un después en la carrera de sus responsables, además de sumar algunos estrenos en la grilla a modo de presentación especial.
A continuación presentamos un resumen de los primeros títulos que pasaron por el ciclo.
Musarañas, de Juanfer Andrés y Esteban Roel.
Una producción que estuvo a punto de desfilar por nuestras salas comerciales durante el año pasado, pero que lamentablemente se quedó afuera, se hizo presente en la grilla como una de las novedades del género. Musarañas, dirigida por Juanfer Andrés y Esteban Roel, está apadrinada por Alex de la Iglesia, por lo que no debe extrañarnos encontrar varios de los elementos que caracterizan la filmografía del realizador, aunque la película consigue refrescar con mucho acierto el humor negro que alumbrara a clásicos inoxidables del cine español como El Día de la Bestia. Este relato ambientado en la década del cincuenta se desarrolla en los interiores de un edificio ubicado en Madrid, mientras presenta un triangulo de relaciones complejas entre dos hermanas y un misterioso vecino que sufre un accidente frente al departamento de estas mujeres. Una historia de encierros (la hermana mayor sufre de claustrofobia y tiene cautivo al personaje masculino), que incluye uno de los desenlaces más retorcidos y efectivos de los últimos años.
Saga Rec, de Jaume Balagueró y Paco Plaza.
Una de las particularidades de la programación es la inclusión de una saga completa, una maniobra que suele aprovecharse cuando se trata de rescatar determinados clásicos que pertenecen a una misma franquicia, aunque en esta oportunidad se trata de uno de los títulos más recientes del género español. Rec, creada en conjunto por la dupla de Jaume Balagueró y Paco Plaza, sorprendió a los devotos del terror contemporáneo hace casi una década atrás, pero su historia se extendió a lo largo de tres entregas más, concluyendo con Rec Apocalipsis en el 2014. Quienes aun no se habían atrevido a descubrir semejante exponente del found footage (la última herramienta presentada por el género, aunque la técnica fue variando a lo largo de cada entrega), tuvieron la oportunidad de disfrutarla en pantalla grande. Cada capítulo presenta una característica determinante: Rec desarrollaba un movimiento constante mientras reducía sus espacios, Rec 2 se aventuraba mezclando la acción con el suspenso, Rec Génesis apostaba por el gore y la sátira, y finalmente Rec Apocalipsis recurría a la paranoia y la claustrofobia insignia del género fantástico. Los norteamericanos intentaron copiarla, pero fracasaron rotundamente.
El Orfanato, de Juan Antonio Bayona.
Podríamos decir que la saga de Rec adquirió una dimensión popular en el mercado internacional, gracias a una muy inteligente fusión de recursos comerciales por parte de sus autores. Pero la película que sin duda dejó una marca indeleble en el género es El Orfanato, dirigida por el entonces debutante Juan Antonio Bayona, algunos años antes de consagrarse en la industria con Lo Imposible. La producción que se ganó la atención de Guillermo del Toro, y que consecuentemente fue premiada con siete premios Goya, también es otra perlita que pudimos volver a disfrutar en pantalla grande, en especial si tenemos en cuenta su atmosfera clasicista, digna de los tempranos trabajos de Narciso Ibáñez Serrador (piensen en La Residencia y sus escenarios). Un caserón tétrico, una mujer sometida, niños sospechosos y una amenaza oculta, suelen considerarse una combinación un tanto desgastada por los productores, pero El Orfanato consiguió reformular estos estereotipos de manera exitosa. Una genialidad que los norteamericanos todavía no supieron cómo hacer para adaptarla.
Enrique D. Fernández