Día 5
Miércoles 8 de agosto.
En paralelo a un día importante en la historia de la Argentina, el MARFICI continuó ofreciendo una programación variada.
Comenzó la retrospectiva dedicada a Diego Lerman, que también llegó al festival en calidad de jurado de la Competencia Internacional de Documentales. De esta manera, el público pudo disfrutar de Tan de repente, de 2002, ópera prima del director.
Por el lado de la sección Criaturas de la Noche se destacó Luciferina, de Gonzalo Calzada. Una historia de posesión demoníaca ambientada en el Tigre, con un importante despliegue de producción y momentos escalofriantes.
También fue proyectado Los corroboradores, documental sobre una sociedad secreta que en el siglo XIX planeaba convertir a Buenos Aires en una nueva París. Su director, Luis Bernárdez, estuvo presente y charló con el público al final de la función. Entre otras cosas, comentó que concretar el proyecto le llevó diez años, y que su nivel de compromiso –puso dinero de su propio bolsillo- casi provoca la ruptura de su matrimonio. También, ante una de las preguntas de los espectadores, confesó que tiene material para dos películas más sobre el tema, pero que no las concretaría a no ser que aparezca alguien dispuesto a financiarlas.
Una segunda mitad de festival que empezó con fuerza.
Día 6
Jueves 9 de agosto.
El tramo final del MARFICI permitió una nueva proyección del bloque 1 de la Competencia Nacional de Cortometrajes y de la Competencia Marplatense. La mayoría de los responsables de esos trabajos estuvieron presentes y pudieron agradecer al público y prestarse para charlas después de las funciones.
En paralelo, el público pudo disfrutar de una buena cantidad de documentales y obras de ficción, como Mientras tanto, de Lerman, de 2006, que integra la retrospectiva de su obra.
Appennino, de Emiliano Dante (Italia, 2017 – Competencia Internacional de Documentales)
En agosto de 2016, los Apeninos centrales de Italia fueron escenario de un terremoto que dejó 296 muertos y 388 heridos. El cismo provocó desastres en esa zona y repercutió en ciudades como Roma y Florencia. Ya en 2009, un terremoto había hecho estragos en las proximidades de L’Aquila, hecho que inspiró al cineasta Emiliano Dante a registrar la experiencia en tres documentales: Into the Blue (2009) y Habitat: Note personali (2014). Appennino, de 2017, completa la trilogía, pero ahora centrándose en el caso mencionado al comienzo.
Mediante imágenes en blanco y negro, y con el mismísimo Dante como narrador, se presenta a una ciudad todavía en construcción, donde las ruinas pasaron a ser parte de la cotidianidad. También hay testimonios de especialistas y de sobrevivientes, pero el director no se queda en eso: lejos de permanecer en una estructura convencional, él mismo va narrando los pormenores de la producción, incluso cuando dos de los afectados por el sismo terminaron enamorándose. También se vale de segmentos animados para ilustrar el detrás de cámara. El resultado final sigue siendo fuerte, pero sin caer en un tono depresivo.
Appennino trasciende el documental sobre un terremoto y sus consecuencias para erigirse como un film acerca de la experiencia de hacer un documental sobre un terremoto y sus consecuencias.
El silencio es un cuerpo que cae, de Agustina Comedi (Argentina, 2018 – Competencia Internacional de Documentales)
“Cada familia es un mundo”, indica el refrán. Y la directora Agustina Comedi, en El silencio es un cuerpo que cae, su ópera prima, nos invita a adentrarnos en su propio mundo, a través de la figura de su padre: Jaime, quien murió en un accidente con un caballo cuando ella era chica. Jaime, que además de ser muy atento con su esposa y sus hijos y de llevarlos a Disney y de encargarse de que nunca les faltara nada, también tenía sus secretos. Por un lado militaba en Vanguardia Comunista (luego conocido como Partido de la Liberación), organización de carácter marxista-leninista. Por otro, era homosexual, tenía novio (Néstor, con quien luego quedó una amistad) y frecuentaba el ambiente under, donde tenía buena relación con otros homosexuales y trans.
Valiéndose de grabaciones en VHS registradas por el propio Jaime, más filmaciones en Super 8 y entrevistas a quienes lo conocieron en el ámbito privado, Comedi arma el rompecabezas de la vida íntima de su progenitor y también de toda la familia. Ella misma también oficia de narradora, y sin explicar sus sentimientos, sin emitir juicios de modo explícito, expresa respeto, admiración y cariño por la figura de Jaime.
Además, mediante esta historia entre muchas, el documental permite trazar un panorama de cómo era la vida en la Argentina de los ’70 y ’80: la represión militar, la influencia de los mandatos sociales, la aparición del SIDA, el miedo, la ocultación, la verdad, la lucha.
El silencio es un cuerpo que cae honra la vida de un hombre que, pese a los obstáculos que debió sortear, fue muy querido por quienes lo rodeaban, a la vez que la directora presenta situaciones de décadas anteriores con un fuerte correlato actual.
Día 7
Viernes 10 de agosto.
A las 11 hs, el Aula Magna de la Facultad de Derecho fue escenario de la master class del realizador Santiago Bou, quien dio detalles de la preproducción en trabajos de animación stop motion. Un trabajo que explicó de manera amena, ayudado por la proyección en pantalla grande de una serie de gráficos y de bocetos de sus propias creaciones, como el multipremiado corto Padre y su próximo proyecto. También contó acerca de cómo trabaja mayormente él solo y de la obtención de apoyo económico en Francia y por parte de los concursos del INCAA. Resultó una estupenda oportunidad para interiorizarse en el detrás de escena de un proyecto animado, sobre todo cuando se realiza de manera independiente. El público, entusiasmado, no dejó de hacer preguntas, por lo que el encuentro se extendió casi una hora más.
A las 18:15 se desarrolló la mesa del colectivo Mujeres Audiovisuales, MUA: Mujeres Audiovisuales y el nuevo paradigma audiovisual. Con la productora y docente Ana María Mónaco a la cabeza, hablaron sobre el rol de la mujer en las ficciones (aun hoy, todavía en una posición inferior a los personajes masculinos), de la escasa participación de mujeres detrás de cámara (cuando la mayor cantidad de anotadas a las carreras de cine es de sexo femenino), y para finalizar, una tanda de cortos protagonizados por nenas.
El resto de la programación incluyó, entre otros exponentes, Refugiado, del foco dedicado a Diego Lerman. También hubo un destacado film de la sección Suban el Volumen, a cargo de Javier Diz: Miguel Abuelo et Nada, documental de Agustín Argento, Facundo Caramelo y Juan Manuel Muñiz Uribe, sobre el proyecto discográfico -nunca editado en la Argentina- que Miguel Abuelo y un grupo de músicos grabaron en París durante los ’70. Para ir culminando el MARFICI a puro rock.
Día 8
Sábado 11 de agosto.
Último día del MARFICI 2018, que se despidió con interesantes propuestas.
A las 11 hs. tuvo lugar una master class a cargo de Ponce, montajista de enorme trayectoria que trabajó con directores del calibre de Leonardo Favio, Damián Szifron, Israel Adrián Caetano y Diego Lerman.
Desde las 16, la última tanda de películas. En la sala Melany se desarrolló el tercer bloque de la competencia de cortometrajes. Entre los seis exponentes sobresalieron Semillitas de girasol, de Evelyn, y la tierna animación Los Emigrantes, además de El Hundimiento del Titanic, con una muy lograda cuota de humor. Por el lado de los largometrajes, se destacó el documental The Last Waltz, de Yulia Bobkova, sobre el pianista ruso Oleg Karavaichuk. Ideal para adentrarse en la vida y la obra de un virtuoso, con sus excentricidades y su pasión.
Y a las 20 hs, en el Aula Magna de la Facultad de Derecho, se realizó la ceremonia de premiación. Al comienzo subió al escenario Pablo Jacobo, productor general del festival, quien cumplió diez años en sus funciones y aprovechó para hacer un balance del crecimiento de la iniciativa. También les agradeció a las entidades que vienen brindando su apoyo, al público y a su padre, José Luis Jacobo, creador del MARFICI. Luego hubo palabras de Carlos Fernando Arroyo (Intendente del Municipio de General Pueyrredón) y del mencionado José Luis Jacobo; recordó el origen del proyecto, que funciona como respuesta a quienes escuchaba decir que para tener carrera en cine un marplatense debía abandonar su ciudad natal.
A continuación, la lista de premiados de la noche:
Competencia Marplatense
El jurado de la estuvo compuesto por Santiago Albina, María Cerreras y Mario Marchioli.
Mejor Videoclip: Ciertas Cosas – Gonzalo Villareal
Mejor Corto/mediometraje: Grietas – Gonzalo Piñero
Competencia Nacional de Cortometrajes
El jurado que decidió quién sería el ganador estuvo compuesto por Ana María Mónaco, Santiago Bou y Eduardo Minardi.
Tercera mención: Ama – Silvina Estévez
Segunda Mención: El Capital – Matías Alejandro Gamio
Primera Mención: La Culpa – Jesús Alves
Mejor Cortometraje: La Virgen del Agua – Joaquín Possentini
Competencia Internacional de Documentales
El jurado de la competencia estuvo compuesto por: Alberto Ponce, Diego Lerman y Mariana Arruti.
Segunda mención: Ukamau y Ke – Andrés Ramírez (Bolivia)
Primera mención: Los Sentidos – Marcelo Burd (Argentina)
Mejor Documental: Dreaming Under Capitalism – Sophie Bruneau (Bélgica)
De esta manera concluyó la edición número catorce del MARFICI, un festival ya establecido en la Argentina y en el panorama internacional. Un festival que privilegia tanto una buena programación como la calidad humana, y que siempre va por más.
© Matías Orta, 2018 | orta@asalallena.com.ar | @matiasorta
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