SORPRESAS TE DA LA VIDA
Gianni Di Gregorio, reconocido por su maestría en la comedia italiana contemporánea, nos brinda con su más reciente obra, Astolfo (Nunca es tarde para amar), un fresco de la realidad en clave risueña.
El director grafica, con su característico estilo de humor absurdo, las circunstancias de la vida cotidiana en Artena, una localidad ubicada en la región de Lazio. En ella, las puertas abiertas, en ocasiones de par en par (punto que a los citadinos nos parece un misterio insondable), no pueden faltar.
Con esta descripción como marco, el relato nos transporta a un mundo donde la rutina se mezcla con lo extraordinario de manera encantadora.
El guion cuenta las vicisitudes de Astolfo quien, obligado a dejar el departamento en el que vivió por años, vuelve a su pueblo natal. En ese espacio su mundo se amplía notablemente y se cruza con una variedad de personajes peculiares con quienes intercambia realidades.
El despliegue de los comentarios sociales que derivan del ocupante de la casa familiar, hijo del herrero del pueblo, sumado al accionar ligeramente sospechoso del cura que, ni lerdo ni perezoso, se apodera de un amplio espacio -para el teórico bien de la juventud que se acerca a la iglesia-, son una muestra gratis del particular grupo que funciona, en tono burlón, como muestra de estudio sociológica.
Lo que hace que lo que se narra se convierta en una experiencia tan entrañable, es la habilidad de Di Gregorio para tejer una historia llena de situaciones efectivas de comedia, que incorpora con pericia personajes cercanos y reconocibles. Así viene, luego, la flamante instancia de afecto (en la piel de Stefania Sandrelli) para quien le proporciona el título original al film.
A medida que el cuento avanza, el espectador es testigo de las relaciones inesperadas que se forman entre los habitantes del pueblo, todo ello narrado con perfecta cercanía emocional, elementos que son marca registrada del director.
Di Gregorio es, sin lugar a duda alguna, uno de los grandes representantes de la comedia italiana contemporánea, con el costumbrismo mezclado con algo de ligero grotesco (formas a las que estamos acostumbrados por acá), y con una pizca de amable simpatía.
Su capacidad para capturar la esencia de la vida en un poblado pequeño, para transmitirla luego de manera tan auténtica, es lo que hace que sus películas sean especialmente valoradas.
Su creación resalta los detalles más sutiles de la vida en comunidad, y diseña un ambiente que invita a sumergirse por completo en la historia. Su estilo se combina con una dirección precisa respecto de todo lo que desea transmitir, como la vista de las pintorescas calles empedradas, muestra que captura la esencia misma de la vida local.
En resumen Nunca es tarde para amar, de Gianni Di Gregorio, es una de las grandes posibilidades cinematográficas de esta semana, y nos incorpora en el acercamiento a la reflexión, para ver desde otro lugar las diferentes formas en que se establecen los lazos humanos.
(Italia, Francia, 2022)
Guion, dirección: Gianni Di Gregorio. Elenco: Gianni Di Gregorio, Stefania Sandrelli, Alfonso Santagata, Gigio Morra, Alberto Testone. Producción: Angelo Barbagallo. Duración: 97 minutos.
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