DETRÁS DEL HOMBRE DE ACERO
Tarea difícil es separar lo formal de la historia central a la hora de analizar documentales como este. Sí, la película es demasiado prolija, poco original y se limita a contar lo que quiere, pero los objetivos que se plantea los alcanza con creces. Es que Super/Man: La historia de Christopher Reeve emociona, hace un repaso exhaustivo por la corta vida del actor, deja que los familiares hablen y contenta a los fanáticos de Superman -aunque algunos de ellos estén más preocupados por el perro de James Gunn que por celebrar la vida y obra de Reeve-. No es poca cosa lograr todo esto en casi dos horas.
Aunque suene contradictorio con el título de la película y le quite valor a la existencia de la misma, la historia de Christopher Reeve es demasiado conocida. Su rostro, su cuerpo, su accidente, su lucha; todo fue tapa de diarios y tema central de noticieros de todo el mundo. Por eso, con todo resuelto y contado, los directores tenían una oportunidad para desplegar sus herramientas y convertir a Super/Man en algo más que una simple sucesión de informaciones. La dupla conformada por Ian Bonhôte y Peter Ettedgui, con vasta experiencia en documentales biográficos y quizás no con la maestría de Asif Kapadia pero con una probada eficacia, se apropian de películas familiares de los Reeve y de una gran cantidad de material archivo para estructurar un documental que parece clausurar cualquier tipo de “contenido” (por favor, qué espantosa palabra) alrededor de la figura de una de las estrellas de cine más grandes del Siglo XX.
Con inteligencia, gracias al montaje y al modo en el que estructuraron el relato a partir del momento en el que deciden contar con detalle el accidente que dejó al actor con una parálisis casi total de su cuerpo, los directores toman una serie de decisiones extrañas para un documental tan pulcro y que cuenta con el aval de la familia: ponen en pantalla las críticas de organizaciones de discapacitados por la búsqueda insistente de Reeve por una “cura” o la decepción de sus hijos mayores por la poca atención de él como padre. Otra prueba más de que la mayoría de los problemas del mundo o son políticos o son familiares; y que todo material biográfico también debe girar alrededor de esos dos grandes bloques.
A su vez, entre tantos segmentos cargados de llantos y de pruebas de la resiliencia del propio Reeve, el documental se topa con una serie de revelaciones más que interesantes como el material inédito de su reaparición en los Premios Oscar de 1996 tras el accidente, la vulnerabilidad y presión que sufrió el actor por representar y respetar los valores de Superman, su estrecha amistad con Robin Williams y la irrupción de un análisis (visionario) de la industria de Hollywood por parte de un hombre cansado de las secuelas del Hombre de Acero. Es en esos instantes en los que la película pierde el control de sí misma y, sin querer, se olvida de su prolijidad y liviandad; y son esos momentos los que convierten a Super/Man: La historia de Christopher Reeve en un excelente documental.
(Estados Unidos, Reino Unido, 2024)
Dirección: Ian Bonhôte, Peter Ettedgui. Guion: Peter Ettedgui. Con participaciones de: Christopher Reeve, Johnny Carson, Bill Clinton, Glenn Close, Jeff Daniels, Whoopi Goldberg, Richard Donner. Producción: Ian Bonhôte, Robert Ford, Lizzie Gillett. Duración: 104 minutos.