LA MALDICIÓN DE LAS SECUELAS DE DISNEY
No es una opinión impopular afirmar que Disney actualmente es más relevante por la mala fama que se ha estado ganando contra el público y la crítica especializada, que por la calidad que susnuevos productos tiene para ofrecer. Esta mala fama se debe principalmente a su falta de creatividad. Las carteleras de la empresa han estado llenas de remakes live action de clásicos animados que nadie pidió, véase Blanca Nieves y Lilo y Stitch que se estrenaron las dos este año. Y si no es un remake, es alguna historia original que no termina de ganar relevancia ni aprecio de parte de la audiencia, por ejemplo Elio este año o Wish en 2023. Entre todo ese mar de avaricia se encuentran en una pequeña isla las secuelas innecesarias, aquellas que llevan atormentando a Disney desde casi el inicio de sus tiempos, las cuales eran destinadas a estrenarse mucho tiempo después de la original, a ser aplastadas por la crítica, estrenarse directo en DVD (hoy en día en plataformas) y a ser olvidadas por no estar a la altura de la primera.
Zootopia 2 es un caso diferente, ya que no es una secuela innecesaria, el mundo presentado en su predecesora es tan vasto y amplio en material, como la naturaleza misma, que da una gran oportunidad a la compañía del ratón para sacarle el jugo y hacer más contenido de este universo (bueno, salió una serie en 2022 para Disney+ que nadie vió). Sin embargo, a pesar de haber logrado un trabajo decente en la expansión de mundo, no por nada se tardaron casi diez años en estrenarla, que incluye la historia detrás de la ciudad de Zootopia y una mayor exploración especies que habitan en su mundo, no termina de definir bien los temas que intenta tocar y contradictoriamente, resulta ser lo mismo a la primera en cuánto a estructura, hay un sistema corrupto que nadie conoce, los personajes descubren esto, nadie les cree, lo comprueban, son los héroes y fin.
El film empieza con una recapitulación del primer film, la audiencia se reencuentra con el dúo carismático de Judy Hopps y Nick Wilde, quienes lidian con ser una dupla policial recién formada tras haber salvado la ciudad. Luego de causar destrozos persiguiendo a un criminal y ser enviados a terapia de parejas, lo que acaba siendo un recurso cómico, Judy descubre que hay una conspiración del origen de la ciudad, relacionada a los reptiles, especie exiliada y demonizada, por lo que junto con Gary, una serpiente inculpada de robar un diario importante (un McGuffin) de la dinastía fundadora de Zootopia, Judy y Nick se embarcan en una aventura para descubrir la oscura verdad. El principal problema del film empieza aquí, a pesar de tener un conflicto principal claro, el guion se llena de subtramas y suma más conflictos que duran muy poco y se resuelven tan rápido que no permite un desarrollo conciso.
Jared Bush, director y guionista del film, presenta conceptos muy interesantes y maduros para un mal llamado cine infantil. Observamos la corrupción de un sistema político y social, gente con mucho poder que domina y está detrás del sistema, racismo y discriminación, desigualdad social o conspiraciones, pero debido a que todo es tratado con tan poca seriedad y tiene un ritmo tan acelerado que es casi imposible empatizar con la gravedad del asunto y el peligro que acecha a los héroes.
El otro conflicto que ocupa gran parte del film es el de la relación de Judy y Nick, vuelven a la misma dinámica de la original, ambos contrastan en sus personalidades y objetivos, lo que provoca discusiones y una pelea que después se va a arreglar de golpe al final con un diálogo emotivo. Es tan vacío el conflicto que no impacta, aunque un punto a favor es que por lo menos intentan explorar mása fondo su amistad y la fuerza de su unión, sumado a su dinámica muy entretenida de ver, lamentablemente nada pasa por debajo de la superficie.
Hay un problema con el rol del personaje de Nick Wilde, éste vuelve a ser el idiota despreocupado que era en la primera. Por un lado se agradece que se mantenga su personalidad carismática y pícara, pero aquí no logra generar carisma o simpatía porque parece que volvió a dónde empezó, si antes había aprendido a ayudar al prójimo, acá lo hace de vuelta, como si se hubiera olvidado. Judy se mantiene con la misma personalidad, no tiene un arco porque no lo necesita, desde el primer momento tiene la razón y eso no le permite explorar más facetas de su personaje.
Otro punto en contra que lleva arrastrando a la empresa en el último tiempo: los villanos. Zootopia 2 recae en el plot twist del villano principal invisible, el personaje que parecía ser bueno y antes del clímax revela que no lo es. Lejos de sorprender, termina siendo un desperdicio ¿Qué pasó con los villanos de los noventa como Scar o Jafar? O sin ir muy lejos ¿Madre Gothel en la década anterior? Donde la audiencia ya tenía el conocimiento de que ellos eran los malos y el suspenso estaba en que los héroes no lo sepan. Los nuevos villanos de Disney no son memorables por esta razón, la familia Lynxley, unos linces millonarios que están detrás de la conspiración, tenían mucho mayor potencial para explorar los extremos a los que puede llegar la corrupción, avaricia y el hambre de poder, pero son relegados a un segundo plano.
Para finalizar, Zootopia 2 logra su función de ser un film de entretenimiento, posee una excelente animación, un mundo bien construido y memorable y una trama por momentos interesante, pero siendo que se trata de Disney, una empresa multimillonaria con miles de animadores y guionistas trabajando para ella, es lo mínimo que se puede pedir. Su problema de no saber a donde va y no tomar riesgos la convierte en un producto mediocre sin mucho que ofrecer, empieza, pasan cosas y termina.
(Estados Unidos, 2025)
Dirección: Jared Bush, Byron Howard. Guion: Jared Bush. Con las voces de: Jason Bateman, Andy Samberg, David Strathairn, Idris Elba, Shakira, Danny Trejo, Jean Reno, Macaulay Kulkin, John Leguizamo, Ed Sheeran, June Squibb, Michael J. Fox, Dwayne Johnson. Producción: Yvett Merino. Duración: 108 minutos.
