En la 37° edición del Festival internacional de cine de Mar del Plata se presentó el mítico realizador John McTiernan, cuyas obras Duro de matar, Depredador, La caza al octubre rojo y El último gran héroe, entre otras, han dejado una huella imborrable en la cultura cinematográfica así como en la cinéfila de nuestros tiempos. Además de la charla que dió en el Club Español en la sección Charlas con Maestros, colmada de gente y en donde habló largo y tendido sobre cuestiones culturales, sociales, históricas y la actualidad del cine y su relación con el arte desde inicios de nuestra civilización, presentó las proyecciones de dos de sus más aclamadas obras: Duro de matar y Depredador. Todas y cada una de sus apariciones fueron enriquecedoras y hasta de suma importancia para comprenderlo como cineasta.
Vemos en tus películas algunas referencias religiosas, católicas más que nada. ¿Sos creyente, sos un hombre religioso?
No. Crecí con gente católica (se queda pensando). ¿Qué clase de referencias?
Bueno, en “Duro de matar” John McClane viene desde el cielo en avión, como un salvador divino, en una ciudad llamada Los Ángeles. El nombre de su mujer es Holly (Sagrado) y todo pasa en vísperas de Navidad.
(piensa) Yo siempre digo que la religión es irrelevante. La familia de mi padre era católica y me mandaban a una escuela católica, pero la familia de mi madre no lo era. Asi que siempre tuve cierta libertad. ¿Sabes? Todas las religiones te dicen: “éste es el dogma” “ésto es exactamente asi” y yo no lo creo. Mis abuelos claramente no pensaban así pero estaba del otro lado, asi que supongo es una cuestión de moral la que trato de expresar. Podemos tener personas de diferentes religiones, ¿sabes?
Puedo tener a un musulmán en medio de un grupo de vikingos (se refiere a 13 guerreros) y seguiría siendo musulmán y tener fé en su religión y ser tan bueno como los otros vikingos. No habría diferencia.
Para vos entonces no es importante
Bueno, no es que no sea importante. Es un acto, una declaración sobre no decidir sobre una persona a partir de su religión. Mirá, en la zona donde nací de Nueva York, en el pasado, antes que yo naciera, solían odiar a los católicos, a los católicos irlandeses y cuando era pibe mucha gente judía se había mudado a esa zona y había discriminación hacía ellos. Después de ir a la escuela católica fuí a una escuela pública donde me mezclé con otros chicos judíos.
Así que siempre trato de decir que no importa la religión de la gente y que no podes decidir por ellos sobre la clase de persona que son. Trato de hacer eso. Por ejemplo, Graham Greene (actor de Duro de matar 3:la venganza) es indio, es un indio americano, indígena, pero también es católico. ¿Si? ¿Cuál es el problema? (Hace silencio un rato)
Es uno de los temas básicos de las películas americanas desde, no sé, hace unos 67 años. Usualmente es la típica cosa entre gente blanca y gente negra y es un tema contínuo. Creo que ahora es un tema “viejo”, “pasado” ya que somos de la misma especie. Hasta el tema de la nacionalidad me parece una idea ridícula y antigua. No hago películas como las de Stanley Kramer (director de Adivina quién viene a cenar) donde se tocan temas tan importantes como esos, pero al menos, de alguna manera lo intento.
¿Cómo ves “13 guerreros” con los años? Para mí es una de tus mejores películas.
No la veo desde hace tiempo. Pero pienso que es divertida, me gusta. Hay muchas boludeces relacionadas a Michael Crichton (escritor de la novela en que se basa la película), pobre, que en paz descanse, no quiero hablar mal de él, pero que la prensa terminó exagerando. Sólo reniego de un par de tomas, una es una con un indio y unos cuernos de búfalo. Odio eso.
Para mí es una de las grandes películas de los 90.
Ayer en la charla (en el Club Español) te pregunté cuáles eran tus directores americanos preferidos. Me contestaste: John Ford y Stanley Kubrick. Pero cuando miro tus películas te veo más cercano al cine de Howard Hawks. ¿Te gusta Hawks?
Si, seguro, pero… ¿a qué películas te referís?
Hablo del estilo.
Ah, el estilo, está bien. Bien. (Piensa sobre ello) ¿Qué cosas?
En el lugar que tiene la mujer al lado del hombre. Son mujeres fuertes que van a la acción. Los guiones son sencillos, precisos. Los protagonistas son siempre profesionales, casi siempre hay un grupo, no sé. Varias cosas. Para mí te veo más cercano a Hawks que a Kubrick.
Oh, nunca quise ser como Kubrick. Ojalá lo hubiese sido.
Para mí sos mejor director que Kubrick. Personalmente no me gusta.
Bueno. Algunas cosas no me gustan tampoco pero me gustan La patrulla infernal y La naranja mecánica, que me parece una locura, realmente una locura.
¿Cómo fue el proceso del guión en “Duro de matar” con Steven DeSouza? ¿Pusiste ideas propias en el?
Oh, si. Lo reescribimos por completo. El original era sobre terroristas…
A vos no te gustaba esa idea
Bueno, leí el guion un par de veces y le dije a Joel (Silver, el productor) que nadie disfruta de los terroristas. Los terroristas no son divertidos. Estés del lado de los terroristas o no estés de su lado, no salís del cine sintiéndote bien. Así que si, reescribimos todas las ideas pero el estudio quería que empecemos a filmar rápido, así que teníamos unas 30 páginas nada más cuando arrancamos. Pero las ideas de Steven eran geniales, él sabía cómo hacer este tipo de cosas.
