Cobertura
exclusiva desde NY por Carla Cuesta
L’Image Manquante (The Missing Picture), de Rithy Panh
El film dirigido por Rithy Panh es un trabajo
de proporciones épicas: demandó dos años de realización y se centra en los
recuerdos del director sobre los cuatro años que vivió bajo el régimen Khmer
Rouge en Camboya, incluida la progresiva destrucción de su familia y su
cultura. Al no contar con objetos materiales de aquel entonces, el cineasta
utiliza narración en off combinada con dioramas y material de archivo. Las
maquetas le permiten volver a lugares a los que ya no puede regresar. La
película es un intento por reconstruir su historia y combina imágenes de la
vida durante el régimen con otras de su infancia.
Los dioramas, realizados con lujo de
detalles, transmiten perfectamente las vivencias. La expresión facial de los
muñecos, así como detalles físicos tales como la protuberancia de sus costillas
o los estómagos abultados por el hambre, convierten el padecimiento en algo extremadamente
real.
La propuesta estética se refuerza con la inclusión
de material de archivo recuperado de Camboya. Parte de éste es en blanco y
negro, parte en color. El contraste entre los distintos registros cromáticos
refuerza las diferencias entre su infancia y el período durante el Khmer Rouge,
la vida en la ciudad y la vida a la intemperie, los sueños y la realidad. La
alternancia entre dioramas y material de archivo, combinada con un diseño de
sonido muy acertado, resulta en una narración poderosa y muy original en lo
estilístico. Los cambios visuales agilizan el desarrollo y logran que el
espectador reciba toda la información que Panh desea transmitir.
Fotografía conferencia del director Rithy Panh via Skype
El director habló en conferencia vía Skype acerca
del significado del título. “La imagen faltante” se refiere a un
fragmento perdido de material de archivo, filmado por un cameraman
antes de ser asesinado por el régimen. También apunta a los recuerdos
personales desaparecidos. De esta manera, la película estudia la censura a la vez
que los mecanismos de la memoria, las razones por las que algunos recuerdos
quedan fijos y otros se modifican. Pero también se refiere a las películas de
propaganda y la representación trastocada que llegaba al exterior del comunismo
en Camboya, en contraste con la realidad que vivían sus habitantes. En un
cierto momento, el narrador se refiere al régimen y afirma que “no hay verdad,
sólo cine: la revolución es cine”.
L’Image Manquante es una película valiente, dura pero
necesaria. Es el retrato de lo peor de la humanidad: la explotación, la
mentira, la traición, el genocidio, la privación de la libertad, y la
destrucción de la educación y la cultura. Los recuerdos felices de la vida
antes del régimen alivian el horror pero dejan una sensación amarga a
posteriori. Quizá el único vestigio de optimismo está en saber que su
protagonista sobrevivió, en parte tal vez porque nunca pudo normalizar lo que
le tocó vivir.
Jimmy P.: Psychotherapy of a Plains Indian, de Arnaud Desplechin
Jimmy P… está basada en Realidad y Sueño, libro del antropólogo
Georges Devereux. Se trata de la descripción de sus sesiones de terapia con un
miembro de la tribu Pies Negros. Protagonizada por Benicio del Toro como Jimmy
Picard y Mathieu Amalric como Devereux, con dirección de Arnaud Desplechin, la
película es la historia del encuentro y amistad entre dos hombres que en
circunstancias normales jamás se hubieran conocido. Es también la exploración
de los recuerdos y sueños de Jimmy.
En los años 50, Jimmy Picard, veterano de la
Segunda Guerra Mundial, ingresa al hospital militar psiquiátrico Topeka en
Kansas. Sufre de mareos, dolores de cabeza intensos, ceguera temporal, pérdida
de audición y ensimismamiento; sin causas fisiológicas aparentes. Le
diagnostican esquizofrenia a falta de una respuesta mejor pero su psiquiatra
duda y decide pedir ayuda. Así, entra en la trama Georges Devereux, antropólogo
educado en Francia, que pasara dos años viviendo con la tribu mojave en
Colorado.
Si bien Devereux no es un psicólogo en el
sentido tradicional, logra comunicarse con el paciente y el hospital lo
autoriza a tratarlo. En una verdadera cruza entre psicoanálisis y antropología,
la película sigue el tratamiento de Jimmy y el desarrollo de su amistad con
Devereux. La elección de del Toro y Amalric en los roles protagónicos resulta
sumamente acertada porque las diferencias entre ambos refuerzan el contraste
entre sus personajes. Jimmy es reflexivo, reservado e incluso solemne; Devereux
es enérgico, excéntrico y cosmopolita. Si bien destaca la actuación de del
Toro, en quién recae el peso de la narración, todo el elenco es excelente y muy
parejo en su conjunto.
La película resulta muy optimista si la
comparamos con otras historias situadas en los EEUU de la postguerra, en
particular aquellas prototípicas del film noir. Aquí los prejuicios de los
médicos surgen más del temor a lo desconocido (Jimmy es el primer nativo de los pueblos originarios que trata el
hospital), que de la animosidad. No obstante hay un deseo común de ayudar y
sobreponerse a la incomunicación.
Fotografía conferencia del director Arnaud Desplechin via Skype
Jimmy P… está filmada
íntegramente en locaciones -marca de estilo de Desplechin- y nos muestra las
praderas de Montana, donde está situada la reserva de los pies negros, el
hospital psiquiátrico en un pueblo rural de Kansas, y Brooklyn con todo su
frenesí de gran ciudad. Resulta interesante el contraste y contribuye a la
progresión dramática. Desplechin, por ejemplo, ubica las sesiones en distintas
salas (y a veces incluso en el exterior) del hospital, diferenciándolas con
precisión. Las intercala con los sueños y recuerdos de Jimmy, filmados en su
mayoría en exteriores en la reserva o el campo de batalla.
Completa la película la musicalización del
legendario Howard Shore, cuya única consigna fue investigar la música de la
época. Tenemos un motivo alegre y rápido para Devereux, y un sonido de orquesta
más clásico y oscuro para las escenas con Jimmy.
Un gran trabajo en los aspectos técnicos y
narrativos, Jimmy P… constituye una
interesante mixtura cultural, tanto en lo que respecta al dúo protagónico como
en el tratamiento de una historia tan norteamericana por parte de una producción
francesa. La amplia utilización del diálogo en la narración (en contraposición
al estilo de Hollywood), sumado a lo poco usual del tema tratado, genera una
obra sumamente original: única, iluminadora y profundamente humana.
