Mercado de Futuros (Mercedes Alvarez, España, 2011)
Al igual que en El Cielo Gira, Alvarez analiza el futuro observando el presente, lamentando el olvido sobre el pasado.Mientras que la civilización le da la espalda a los edificios históricos, tira los libros de antaño, pisa a los pequeños agricultores, hay un nuevo mundo que crece: el inmobiliario.
La especulación inmobiliaria fue la causa de la crisis económica que azotó España dos años atrás. Alvarez y su cámara “invisible” registran a vendedores de sueños. Personas que en ferias inmobiliarias pueden llegar a venderte un condominio como si se tratara del último refugio de la humanidad en Hungría o Dubai. El tiempo es dinero, y se liquida todo hoy en día. Los vendedores deben desprenderse de lo último, cuanto antes mejor. Al mismo tiempo, un anciano, vendedor de antigüedades, hace lo posible para no “vender” en una feria de antigüedades situada en los márgenes de la ciudad.
Con un sentido de la ironía que nunca es obvio ni redundante, un discurso fiel, claro. Pero a la vez constructivo, una puesta en escena meticulosa, simétrica, donde el tiempo es eterno, Alvarez captura el tiempo en forma de contraste. Desde aquellas personas que se preocupan por lo natural y para quienes el tiempo, en apariencia les es esquivo, aunque ellos no se percaten, hasta jóvenes viejos que tienen que vender acciones YA.
No solamente se trata de un meticuloso análisis de mercado, sino de una reflexión acerca de las diversas culturas imperantes y sobretodo, al igual que El Cielo Gira, Mercado de Futuros habla sobre el olvido, la importancia de mantener la cultura, de revisitar la literatura clásica, los antiguos libros de historia y ciencia, y que básicamente, mientra en la tierra todo va más rápido, el cielo sigue girando como la ha hecho siempre, a un mismo ritmo.
Una obra exquisita para mirar y analizar más de una vez. Un ejemplo de documental.
