EN SUBIDA
Ya en la opera prima The Climb, basada en el cortometraje homónimo, se accedía a la alianza laboral entre los guionistas y protagonistas, Michael Angelo Covino y Kyle Marvin. Mike y Kyle, tanto en realidad como en ficción, parecían tener una química única, que se potenciaba en sus registros de amigos en los que abundaba el amor-odio. Como en The Climb o “La subida”, la carrera profesional de ambos tras estos seis años de ausencia va definitivamente en esa dirección.
En Splitsville, a diferencia con The Climb, la apuesta del bromance se acrecenta, por más que se traten similares tópicos referentes a las relaciones de pareja, como son específicamente los engaños. Aquí se tornan más conflictivos cuando involucran a personas que se conocen entre sí; en este caso, entre amigos. Pero, los elementos presentes aquí también permiten conjugarse con otros géneros, empezando por la denominada “comedia de rematrimonio” o la “comedia romántica”.
En The Climb, la apuesta del plano secuencia y las charlas mientras pedaleaban con sus bicicletas en subida también elevaba el tenor de los diálogos y el efecto del engaño confesado. En Splitsville, la apuesta es aún mayor: el bromance no se limita tan solo a la relación de amigos varones, sino que presenta a sus respectivas parejas, July y Ashley, interpretadas respectivamente por Dakota Johnson y Adria Arjona; dos excelentes decisiones actorales tras involucrarse en éxitos del género romántico como Materialists y Cómplices del engaño (Hit Man). El film permite entrever que ante una ruptura, los hombres, como si fuesen niños, no adoptan decisiones adultas, mientras que las mujeres sí. Ellas son quienes los encausan a pesar de sus inseguridades, rabietas y perdones.
En el inicio, Carey (Marvin) y Ashley (Arjona), tienen un acalorado diálogo mientras transitan lo que pareciera ser un road trip. Hasta que un accidente automovilístico no solo cambia el sentido y ánimo del momento; da pie al planteo del fracaso de la relación y eventual pedido de divorcio. Ashley pide terminar con Carey, y él, como primer impulso tras la angustia, se larga a correr abandonando no solo el automóvil sino a Ashley. Carey arriba al hogar de la pareja amiga compuesta por Paul (Covino) y Julie (Johnson), quienes ya saben todo lo sucedido y le brindan cobijo y una charla tranquilizadora a Carey, revelando que la relación entre ellos funciona debido a tratarse de una pareja abierta.
Ante el sensible estado de Carey, se presenta una situación y clima tal que Carey besa a Julie y mantienen una relación sexual. Si bien existía esa permisividad entre la pareja, y tras otros conflictos secundarios en su relación, Paul pierde el control y se violenta.
Paul y July también se separan y comienza una nueva relación entre los recientemente separados, Carey y July. Surgen confusiones y entrelazados, amigos y nuevos affaires, hasta culminar en reflexiones maritales y de pareja, siempre en tono de comedia.
Splitsville es graciosa y sensual, por momentos demasiado, y esto se debe en gran parte a esa química entre los protagonistas. En el film hay lugar a una pelea incesante entre amigos, majestuosamente filmada y coreografiada que vale la pena destacar.
La dirección de Covino y esta alianza entre amigos, guionistas y actores pareciera perfilar una fructífera carrera en conjunto, efectiva y por ahora en subida.
(Estados Unidos, 2025)
Dirección: Michael Angelo Covino. Guion: Kyle Marvin, Michael Angelo Covino. Elenco: Dakota Johnson, Adria Arjona, Kyle Marvin, Michael Angelo Covino, Simon Webster. Producción: Michael Angel Corvino, Jeff Deutchman, Ro Donnelly, Ryan Heller, Dakota Johnson, Emily Korteweg, Kyle Marvin, Samantha Racanelli. Duración: 100 minutos.
