Jurassic Park
(Imax 3d) (Estados Unidos, 1993)
Dirección:
Steven Spielberg. Guión: Michael Critchton, David Koepp. Elenco:
San Neill, Laura Dern, Jeff Goldblum, Richard Attenborough, Joseph Mazello. Producción: Kathleen Kennedy, Gerald R.Molen. Distribuidora: Uip. Duración: 127
minutos.
El día en que los
dinosaurios volvieron a nacer
Veinte
años pueden ser mucho tiempo o quizás muy poco. En el universo cinematográfico,
dos décadas de diferencia del día del estreno de una película la pueden dejar
completamente en el olvido o resaltar su vigencia, ya que hay films que a pesar
del paso del tiempo, siguen siendo modernos, sorprendentes y hasta
vanguardistas. Este es el caso de Jurassic
Park de Steven Spielberg.
Todo
esto se debe a su re-estreno, que en este caso es en formato 3D e IMAX. La cuestión
no es hacer un nuevo análisis sobre Jurassic
Park, ya que centenares de personas especializadas ya lo han hecho: pretendemos
señalar la vigencia de una película y, sobre todo, remarcar el rol del espectador
y las reacciones que puede provocar volver a ver en pantalla gigante un film de
estas características.
Lo
que más impacta de volver a ver la película de Spielberg (muy recomendable en
IMAX) es darse cuenta de que vendría a ocupar un lugar más que fundamental en lo
que al cine fantástico actual y de ciencia ficción se refiere. Cierto género tuvo
su apogeo entre las décadas de 1960 y 1970 con films míticos como 2001: Una Odisea del Espacio de Stanley
Kubrick, Naves Misteriosas de
Douglas Trumbull, La Guerra de las Galaxias de George Lucas, Alien de Roddley Scott, y hasta Encuentros Cercanos del Tercer Tipo del
mismísimo Spielberg. Además de sus virtudes narrativas, estas obras se
destacaban por algo fundamental: su belleza visual. Cada escenario, artefacto o
hasta ser sobrenatural resultaba creíble y construido de una manera cercana a
lo artesanal, lo que pone de relieve esa magia de hacer cine que se fue
perdiendo -en parte- con el transcurrir del tiempo.
Con
el cine contemporáneo vino el recurso del CGI y, aunque no siempre esté mal utilizado, la mayoría de las veces -con el abuso de éste en films como Transformers de Michael Bay, entre
tantos otros- provoca que las películas luzcan sumamente artificiales y
carezcan de ese encanto que tenían sus pares del pasado.
Estos
polos opuestos nos remiten entonces a Jurassic
Park debido a que el film de Spielberg estaría en el medio de ambas etapas:
acercándose a un trabajo artesanal pero también aprovechando la llegada de las nuevas
tecnologías, sin jamás abusar de lo digital. Todo esto produjo que en 1993 se
vea esta película como una revolución en el universo de los efectos visuales, en
donde se creaba un parque con dinosaurios vivos de una manera tan novedosa y
verosímil que provocaba un fuerte impacto.
Si
bien a nivel general la transposición a digital de una película que no fue
concebida con dichas características resulta algo absurdo, en este caso hay que
decir que la utilización del 3D es correcta y hasta por momentos ayuda a la tensión
dramática que construye el film, más aún si es visualizado en una pantalla gigante.
Pero
volviendo a la premisa de la vigencia del film y al impacto que aún puede
seguir causando en el espectador medio, hay que decir que tras veinte años Jurassic Park se ve sumamente moderna y
hasta futurista. La película sigue manteniendo una elegancia atroz, desde esa
música envolvente de John Williams hasta sus más mínimos detalles: hablamos, en
suma, de una obra portadora de un perfecto equilibrio entre el arte y el
entretenimiento.