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CRÍTICAS - CINE

La Patria Equivocada

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La Patria Equivocada (Argentina, 2009)

Dirección: Carlos Galettini. Guión: Luisa Irene Ickowiczy, Carlos Galettini. Elenco: Juana Viale, Adrián Navarro, Esteban Pérez, Juan Ignacio Bianco, Elio Marchi. Distribuidora: Aura Films. Duración: 105 minutos.

La película equivocada.

Leyendo material publicitario del film, alcanzo a ojear las palabras “coraje, venganza y pasión”, sinceramente deben referirse a las aptitudes que deberá tener el espectador luego de sentarse a ver otro de los considerados peores films del año.

Un drama épico que abarca casi 100 años de historia argentina, con tinte melodramático televisivo y una escueta noción de traslado de una novela (de Dalmiro Saenz) al cine. La trama que va sucediéndose a partir de acotados períodos de tiempo, inclusive desgastados por el excesivo detalle de información de fechas, hastían llegando al punto de terminar desconociendo en qué momento precisamente de la historia nos encontramos. La seguidilla de información, no sirve más que para desorientarnos.

A su vez, esta es una de esas películas en las que nos cuesta tomarnos en serio los sucesos que ocurren, una muerte hasta puede resultar graciosa, los diálogos hilarantes y las situaciones de antinaturalidad también, si a esto le añadimos la utilización de antiquísimos efectos de los cuales no me alejo al destacar que son cercanos al cine del realizador Ed Wood –considerado el peor director de la historia-, el resultado de esta vergonzosa película que será publicitada por la simple belleza facial de la ¿actriz? Juana Viale, quien con una caracterización carente de todo tipo de matices, utilización de un registro de idioma y voz adecuado, no ve más que estar inmersa en un trabajo que hace agua por todos lados. Viale como eje central del relato, interpreta a Clarita y luego a Clara, abuela y nieta respectivamente, mujeres relacionadas con miembros del ejército, la primera con un desertor, alternada con la historia de su hijo y luego de vuelta con una historia de venganza contra el teniente López (Adrián Navarro).

Si, la Conquista del Desierto nunca resultó más graciosa desde Locuras en el Oeste de Mel Brooks, existen situaciones en trincheras, gritos, abrazos desmedidos entre integrantes del ejército que bien podrían ser utilizados en un film de comedia sin siquiera darnos cuenta.
Inexplicablemente el film ha sido coproducido al haber resultado electo como proyecto en el Concurso Cine del Bicentenario del Incaa hace dos años atrás, junto con un aporte de San Luis Cine. Este es otro de los puntos a tener en cuenta sobre la preproducción de guiones de tal calibre, ¿Quién los lee? ¿Quién los elige? ¿acaso luego ese jurado ve esos proyectos realizados?.

Carlos Galettini, su director, ha realizado trabajos nacionales como la saga de Los Superagentes, Los Bañeros más Locos del Mundo, la saga de  Extermineitors, y luego alternó su carrera con más dignos como Convivencia, Policia Corrupto, Besos en la Frente y Ciudad del Sol. Cuesta creer que en la filmografía de un director ondulante, que ha producido trabajos de un cine que rara vez quisiéramos volver a tener exhibido en la cartelera porteña regrese con un trabajo que atrasa sobre las nuevas concepciones de cine argentino, donde muy poco puede destacarse o subrayarse, concluyendo en esta, una equivocación.
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