Morgue Story (Morgue Story: Sangue, Baiacu e Quandrinhos, Brasil, 2009)
Dirección y Guión: Paulo Biscaia Filho basada en su propia obra teatral. Producción: Viviane Follador Elenco: Mariana Zaette, Leandro Daniel Colombo, Anderson Faganello Duración: 78 minutos.
Las grandes obras maestras de terror generalmente vienen en tarro pequeño. Son filmadas con bajos presupuestos y la mayoría de las veces no provienen de Hollywood, e incluso ni siquiera de Estados Unidos. Es así, que uno de los grandes directores del género es italiano (el gran Darío Argento), o el mejor exponente contemporáneo de la “comedia de terror, es el neozelandés, Peter Jackson… Por lo menos en su primera y mejor etapa… Después vinieron los anillos y los gorilas.
Dentro de Estados Unidos, el padre del género fue el gran Roger Corman y más recientemente, Sam Raimi. Ambos con presupuestos ínfimos lograron obras inolvidables, tantas veces imitadas y nunca igualadas.
Pero sin ir demasiado lejos, en Brasil se encuentra, un verdadero director de culto como Jose Mojica Marins. Y se podría decir que con semejante ejemplo, debe tener varios seguidores. Pero no. El género es solo captado por un par de directores más. Un nuevo realizador quiere abrirse paso. Se trata Paulo Biscaia Filho, quien hace 15 años formó una compañía teatral, cuya meta fue realizar obras de terror. Morgue Story se trata de su puesta en escena más exitosa, y debido a sus referencias cinematográficas, varias personas le recomendaron a su director, llevarla a la pantalla grande.
Si bien mantiene cierto aspecto teatral, teniendo en cuenta que un 80% de la película sucede en un cuarto de la morgue, Biscaia, adapta su obra a una estética de cómic, con encuadres y un montaje inspirados en las viñetas de revistas. Este aspecto esta justificado desde el punto de vista de la protagonista.
Ana Argento es una guionista y dibujante de cómics, desafortunada con sus relaciones amorosas. Un día, tras tomar un trago en un bar, fallece y “despierta” reanimada en la morgue.
Por otro lado tenemos a Tom, un agente de seguros tímido y torpe, que tiene recurrentes ataques de catalepsia, que le provocan infartos masivos. Tras varias horas en la morgue, termina “despertando” como si nada, dando sustos infartantes a los pobres forenses. Por último tenemos al siniestro Dr. Daniel, que será la conexión entre los protagonistas, cuando ambos despierten en su morgue. Sin embargo Daniel, un evagenlista ortodoxo y tímido, cuya única relación con mujeres que tiene, es con su propia madre; guarda más que un secreto, y tendrá relación con varios asesinatos.
Mezcla de Re-Animator de Gordon, Braindead de Jackson y cierta estética y humor a lo Kevin Smith (especialmente de Mallrats o Chasing Amy), Biscaia contruye un rompecabezas humorístico y tenebroso. La película se va creando a través de varios flashbacks, donde se explica la relación y origen de cada personaje. Cada uno es más delirante, exagerado y sobreactuado que el otro. El elenco, el mismo de la puesta teatral, se nota cómodo en cada rol. No importa lo teatral que suene. Los códigos del género les dan libertad para poder llevar al extremo cada diálogo.La película es bizarra y no lo oculta. No tiene otra pretensión que provocar risa fácil. Se puede definir como una comedia de enredos, con un nivel de grotesco comparable a Alex de la Iglesia, alguna situación de humor burdo, y citas textuales a la saga de Evil Dead (con homenaje a Bruce Campbell incluido) y Duro de Matar, esta ópera prima de Biscaia es propicia para el amante del género que se conoce todas las obras de terror de los últimos 25 años, y busca pasar un buen momento.
Más allá de que algunos chistes son más efectivos que otros, los 78 minutos de Morgue Story son realmente disfrutables y divertidos.
