La prolífica carrera cinematográfica de Arnaud Desplechin lo convierte en uno de los realizadores franceses más veces seleccionados por los festivales internacionales.
Deux pianos, su más reciente largometraje, convoca a dos actores con carreras ascendientes y a Charlotte Rampling, quien es habitualmente (como en este caso) garantía de buen cine. Ella es Elena, mentora, en la ciudad de Lyon, de consagrados pianistas. Uno de estos es Mathias Vogler (François Civil), a quien convence para que se desplace de Tokyo, su actual residencia, hasta su ciudad natal (Lyon) para dar en el célebre Auditorium una serie de conciertos, incluido alguno a dos pianos con ella.
Elena le explica que el concierto que ejecutarán, a cuatro manos, será el último que tocará en público, ya que hasta ahora siempre lo ha hecho sin la ayuda de partitura, pero no cree poder seguir haciéndolo en los próximos años. Además de cierta manera, ella procura que su alumno preferido se radique en Francia y que en el futuro la reemplace en una delicada tarea consistente en escuchar y seleccionar promisorios pianistas.
Será Max (Hippolyte Girardot), su agente, quien le recomiende “no enterrarse en Lyon”, sino en seguir su exitosa carrera internacional, sea en Japón o en una ciudad europea.
Para Mathias significará también la oportunidad de visitar a su madre, así como a un amigo que conoce desde la infancia, aunque su regreso será desafortunado, ya que este último fallecerá al poco tiempo de un infarto.
La escena en el cementerio judío, donde será enterrado, provocará su reencuentro con Claude (Nadia Tereszkiewicz), esposa del difunto, a quien le piden que pronuncie unas palabras. Señalando que “no sabe hablar en eventos” y recordando que su marido era el mejor contador de chistes judíos, será poco oportuna su intervención al contar, en pleno entierro, uno de estos.
Una foto de Mathias de pequeño y que su madre le muestra, desencadenará una situación insólita y misteriosa en el pianista, quien poco antes se había cruzado en un parque con un niño, de gran parecido con él en la fotografía.
Deux pianos será apreciada por quienes disfruten de la música clásica con una banda sonora que incluye fragmentos del concierto a dos pianos (y percusión) de Béla Bartók, así como obras de Federico Chopin e insólitamente, al final, de Bach.
Este cronista recuerda varias producciones francesas donde el acento está puesto en músicos de alta calificación. En particular y aunque las circunstancias de la trama son muy diferentes, la estética le recuerda a En fanfare (en Argentina: Unidos por la música). Aquí la fotografía es responsabilidad de Paul Guilhaume, quien el año pasado fue el “cinematographer” de Emilia Pérez, recibiendo una nominación al Oscar.
(Francia, 2025)
Dirección: Arnaud Desplechin. Guion: Arnaud Desplechin, Kamen Velkovsky. Elenco: François Civil, Nadia Tereszkiewicz, Charlotte Rampling, Hippolyte Girardot, Annę Kessler. Producción: Pascal Caucheteux. Duración: 115 minutos.
