FLAMENCO!
Libro, Diseño Coreográfico Integral y Dirección General: Jorge Mazzini. Música Original y Dirección Musical: Rodrigo González. Coreografía: Fabiana Pouso, Claudio Arias, Jorgelina Amendolara. Iluminación: Fernando Di Yorio. Vestuario: Pablo Bonet. Diseño y Realización de Títeres: Roman Lamas. Reproducción de Dibujos: Lucia Perrotta. Prensa: Veroutis – Brañeiro.
Primeros Bailarines: Jorgelina Amendolara, Claudio Arias. Artista Invitado: Basilio Cadiz. Primera Bailarina Invitada: Maribel Herrera. Intérpretes: Aimara Bianquet, Dora Prince y Juan Carlos Puppo. Cantaora: Montse Ruano. Ballet Flamenco Palma y Tacón: Juan Ayala, Iván Carrillo Jiménez, Yamil Rabaj, Nataly Cabrera, Camila Donato, Mariela Fernández, Laura Guastini, Sol Roldan. Músicos: Rodrigo González (Primera Guitarra), Mariano Martos (Bajo), Germán Lucas Gigena (Cajón), Lisandro Pejkovich (Violín)
Flamenco! es una obra absolutamente maravillosa, en cada aspecto que la compone, en cada detalle. Es una obra perfecta y a continuación recorreré sus diversos componentes para dar cuenta de ello.
Flamenco! transita varias obras de Federico García Lorca en una combinación de toque, cante, baile, y actuación.
TOQUE
Los músicos son excelentes; en particular se destaca Rodrigo González en primera guitarra. Rodrigo es un tocaor increíblemente virtuoso y le imprime a cada palo esa fuerza y sonoridad características del toque flamenco, mediante técnicas como el rasgueo, el alzapúa, el picado y el trémolo, todo esto combinado con repetidos golpes en la madera. Tiene importantes momentos solistas y, al ser la guitarra EL instrumento flamenco por excelencia, Rodrigo inunda toda la obra de acordes profundos y sentidos.
Lisandro Pejkovich también se destaca en violín, instrumento que impregna a la obra de un aura majestuosa y lírica. Junto con el cajón y el bajo, los cuatro instrumentos componen una orquesta extraordinariamente virtuosa.
CANTE
Los cantaores, Basilio Cádiz (invitado) y Montse Ruano son descomunales. Ambos transmiten toda la pasión y el dolor gitano en un profundo cante jondo en cada uno de los palos. Tienen esa voz característica flamenca, la voz rajá o afillá, ronca, grave, rajada, torturada, cargada de sentimiento, solemnidad y profundidad. Ambos están en perfecta sintonía con los músicos y el resto del cuadro flamenco y acompañan el cante con jaleos, melismas, palmas, golpes y quejios. Ambos son maravillosos y virtuosos.
Montse Ruano, cantaora de origen español, es particularmente increíble y su cante emociona hasta las lágrimas por la carga de sentimiento y pasión que la invade y que transmite cuando canta.
BAILE
Claudio Arias, el bailaor principal, es maravilloso, como pocos bailares que yo haya visto en mi vida. La precisión de sus movimientos de manos y pies con las variaciones de los distintos ritmos o palos es perfecta. La pasión que transmite con su baile la percibimos en todo su cuerpo. Claudio Arias no solo baila con el cuerpo, baila con la cara, transmite toda esa exaltación, sensualidad y belleza en su rostro, y su cuerpo se desplaza por el escenario con una presencia imponente. Por momentos es un torero, por momentos es un hombre que le ha robado la mujer a otro y debe retarse a duelo, por momentos es un galán que intenta conquistar a una joven hermosa y, en todos y en cada uno de esos momentos, sobresale y brilla y el público lo ovaciona. Uno se queda con ganas de ver mucho más de él.
La bailaora principal, Jorgelina Amendolara, y la bailaora invitada, Maribel Herrera, sobresalen también, cada una con su propio estilo. Son hermosas mujeres de pelo oscuro y largo y destilan belleza y sensualidad en cada baile. Los movimientos que realizan con las manos y los pies son de una elegancia exquisita. También como en el caso de Claudio, es pura pasión lo que transmiten estas bailaoras, el sentir la música en lo más profundo del alma y traducirlo en el cuerpo con ese baile increíble.
El resto de los bailaores acompañan muy bien a los principales; todos son sumamente virtuosos. Lo que llama la atención es la coordinación perfecta entre la orquesta y ellos; incluso en los cuadros en los que los músicos nos pueden ver a los bailaores, cada movimiento coincide milimétricamente con cada variación rítmica.
Todos los bailes están ejecutados a la perfección y el público aprecia ese virtuosismo en cada movimiento, en el zapateado, el desplante, el son, y los movimientos de brazos con abanicos.
OBRA DE LORCA Y ACTUACIÓN
Las características de la obra de Federico García Lorca están presentes en este espectáculo: el estilo gongorino que prioriza la narrativa como vehículo para transmitir ideas pero que, a su vez, está plagado de metáforas, imágenes, comparaciones y personificaciones; el estilo indirecto de decir algo sin mencionarlo, lo que se conoce como “parábola”. Muchas veces, las historias comienzan in media res y es el narrador quien nos pone en escena. Con respecto a la temática, toda la obra de Lorca aborda el mundo gitano y la Pena y el Dolor gitanos, el amor y “el otro”. Este último, muchas veces es personificado por la Guardia Civil, que persigue y oprime, o por el resto de la sociedad, que discrimina y margina.
La figura femenina es de vital importancia en el universo gitano. En general, las mujeres son representadas como seres débiles que deben ser protegidos (lo que exalta las cualidades heroicas de la figura masculina). Al mismo tiempo, las mujeres son bellezas de pelo negro, dotadas de gran femineidad, sensualidad y erotismo y, muchas veces, dos hombres se retan a duelo para conquistar el amor de una de estas damas.
Todos estos rasgos típicos del mundo gitano, toda la temática de la obra de Lorca, están perfectamente representados en Flamenco!
Los actores, Dora Prince, Juan Carlos Puppo y Aimara Bianquet, están absolutamente instalados en sus roles y brindan una composición magnifica, dotada de gran sentimiento e impulso dramático, recitando la obra de Lorca con la majestuosidad y la imponencia que dicha obra requiere.
Para finalizar, el último punto que quisiera destacar es el vestuario, a cargo de Pablo Bonet, plagado de colores que van mutando a medida que avanzan los palos, pasando por la estridencia de colores como el amarillo y el rojo hasta llegar a la desolación y la solemnidad del vestuario negro en los momentos más dramáticos de la obra.
Como dije al principio, esta obra es deslumbrante y uno se va del teatro profundamente emocionado por haber presenciado algo tan maravilloso y perfecto.
Teatro: Avenida – Avenida de Mayo 1222
Funciones: Viernes 21:00 hs. Sábados 21:00 hs y 23:00 hs. Domingos 20:30 hs. Domingo 27 despedida.
Entrada: $130
