Atrapados en lo profundo, de Claudio Fäh, es una película entretenida si se le exige poco, teniendo en cuenta que su planteo básico es lo máximo a lo que puede aspirar una producción que se asienta sobre una lógica realista a medias.
Todo comienza cuando un avión se hunde en el Océano Pacífico luego de sufrir fallas en las turbinas. La narración ofrece así lo que se espera, pero debido a la exageración en la representación de los momentos posteriores al accidente genera “Una serie de eventos desafortunados”, en esta ocasión bajo el mar.
Si bien es llevadera, el elenco compuesto entre otros por Sophie McIntosh, Phyllis Logan y Colm Meaney intenta sin éxito armar un rompecabezas con las piezas que proporciona el guion de Andy Mayson. Esto genera cierta incredulidad en el espectador, quien puede rechazar la historia al notar en algunos puntos la falta de coherencia mínima necesaria.
Es cierto que puedo estar juzgando desde un lugar un poco severo, pero tal vez, solamente tal vez, si Mayson hubiera revisado una vez más el material, las fallas no serían tan marcadas y mi opinión sería muy diferente.
Luego de un comienzo con presentaciones de personajes y contexto, tan obviamente acentuadas que se vuelven un poco exageradas (que hasta la empatan con Destino final), el relato toma velocidad con la llegada de la acción esperable.
A esto sigue el desarrollo de un contexto en que la supervivencia es la única regla, y cada decisión tomada por los personajes es crucial. Las diferentes instancias juegan con la psicología humana al empujar a los sobrevivientes a nuevas situaciones extremas.
Si bien trata de ir en el camino de la exploración de los límites éticos, el intento por superar la idea de ser simplemente un thriller nunca llega a buen puerto. Otros films han visitado esos lugares anteriormente y con mejor puntería.
Pese a que el director expresa que el disparador de la historia posee un fuerte gancho, esta apenas logra despegarse de los convencionalismos del género para salir airosa del embrollo en el que entra solita.
Dado que intenta caminar sobre estos elementos reconocibles, a medida que avanza le ocurre casi lo mismo que a los personajes en su inevitable desplazamiento físico y emocional. Por supuesto, agrego esto con la seguridad de no revelar las circunstancias que se presentan a partir de lo obvio, de manera que la sorpresa es finalmente la “No-sorpresa”.
La presencia de clichés y diálogos que, si bien pueden servir como elemento humorístico en medio de los sobresaltos, no dejan de ser parte de la fórmula esperada en este tipo de filmes.
Claramente no se presenta como una obra maestra (tampoco podría si quisiera). Tiene ideas un tanto forzadas, que actúan como herramientas de resolución ante los peligros que enfrentan los protagonistas; y por eso mismo se vuelven improbables, aún en el marco de la ficción que nos convoca.
Atrapados en lo Profundo ofrece entretenimiento sin complicaciones y, si eso es lo que se busca, cumple su objetivo. Para quienes aprecian otros estilos, es mejor explorar las restantes opciones disponibles en cartelera.
(Estados Unidos, 2024)
Dirección: Claudio Fäh. Guion: Andy Mayson. Elenco: Sophie McIntosh, Will Attenborough, Jeremias Amoore, Manuel Pacific, Colm Meaney. Producción: Annalise Davis, Andy Mayson. Duración: 90 minutos.
