Basavilbaso (el sueño terminó)
Dirección: Andés Binetti. Asistente de dirección: Ezequiel Lozano. Dramaturgia: Andrés Binetti en colaboración con el equipo. Iluminación: Andrés Binetti. Escenografía: Martín Escape. Elenco: Malala González, Alejandro Lifschitz, Pablo Sciolini, Mariano Saba. Prensa : Carolina Castro.
El conflicto entre realidades. De eso trata Basavilbaso, la obra escrita por Andrés Binetti en colaboración con el equipo artístico. Las relaciones humanas son aproximaciones a otras realidades, y desde el primer momento queda en claro lo difícil que a veces resulta conectar con el otro. Ese otro que nos mira. Ese otro al que miramos.
Instalados con una carpa en un agreste camping de una pequeña ciudad entrerriana para pasar unos días de descanso en plena naturaleza, una pareja urbana (Alejandro Lifschitz y Pablo Sciolini) no imaginan los pliegues ocultos de su relación. Una joven (Malala González) que se encuentra en una búsqueda creativa, irrumpe en esa privacidad. Un empleado del camping (Mariano Saba), habitante de ese pueblo del interior entrerriano, llega al encuentro de los acampantes ofreciendo algo mas que sus servicios de guía turístico.
La disposición escenográfica y la puesta de luces recrean el espacio de una parcela de camping, su mobiliario y el entorno agreste que la rodea. Permite a la acción, en los momentos creados, fugarse y expandirse en unos, mientras que sostiene otros donde el espacio se cierra sobre ella.
El texto se pasea por situaciones que narran desde lo “pequeño” y cotidiano hasta lo imprevisible. El trabajo de los actores es bueno, logrando que momentos de tensión dramática muy potentes se tiñan con una densa carga de suspenso y misterio. En otros esa tensión se encuentra solapada y latente bajo el velo de la risa que provocan las acciones en el espectador, estallándole en su propia contradicción. Estas situaciones por momentos bordean lo grotesco porque desbordan de realidad y eso es un acierto. En esta dinámica se luce Mariano Saba, generando humor con todo su despliegue escénico sin perder la profundidad de su personaje, es brillante.
Quizás producto de la necesidad de avanzar en el relato, algunas de las situaciones que fueron construyéndose con una sinergia sutil hasta llegar a puntos muy álgidos y fuertes, resultan un tanto abruptas en su desenlace. Esto no altera en absoluto el devenir del relato que transita hacia el final con ritmo, acumulando y cargándose de la energía de conflicto entre los seres humanos.
La obra deja el lugar para pensar: ¿De quienes somos “el otro”, los diferentes?
Teatro: Abasto Social Club – Humahuaca 3649
Reservas: 4862-7205
Funciones: Sabados 23:00 hs.
Precio: $ 35 y $25
