“Conoces a muchas personas y ninguna te llega profundamente, pero luego conoces a una sola, y esa persona te cambia para siempre…”
Jamie Randall, un joven talentoso con gran potencial de vendedor, experto en conquistar mujeres y entablar falsas relaciones, ingresa a la compañía farmacéutica Pfizer, lo cual representa la gran oportunidad para su jefe de poder conseguir un mejor puesto de ventas en Chicago. Al intentar imponer los productos de la firma al Dr. Stan Knight -un exitoso profesional que ha perdido su ideal, quien, oprimido por el sistema se convirtió en cómplice de la marginal operatoria farmacéutica-, Jamie conoce a Maggie Murdock, una paciente de 26 años que padece la primera etapa del mal de Parkinson. Ella es artista plástica pero, debido a su enfermedad, cada vez le resulta más difícil dedicarse a su vocación. Ella no desea involucrarse sentimentalmente con hombre alguno porque cree que nadie podría amarla de verdad a causa de su problema de salud; al igual que Jamie, prefiere mantener sexo casual para no crear vínculos; así comienza la relación entre ambos, a puro sexo, lujuria y pasión desbordada pero sin compromisos ni expectativas o interés alguno en afianzar un lazo más profundo y duradero.
El trabajo actoral de Anne Hathaway en este film va mucho más allá de sus interpretaciones previas en otras comedias, no sólo por sus vigorosos matices en escenas dramáticas, sino también por su entrega sin reparo a las vivencias que le exige el personaje; logra buena química con Jake Gyllenhaal, con quien había trabajado antes en Secreto en la Montaña bajo la dirección de Ang Lee.
El film plantea un romance no convencional que va del sexo al amor, aunque ninguno de sus protagonistas desee este último sentimiento. ¿Pero cómo se hacer para ligarse a alguien condenado por una enfermedad desgastante? es parte del planteo aquí, ya que nos deja pensando qué sucedería si estuviéramos en una situación similar; ¿tendríamos una relación pasajera con esa persona o permitiríamos que se convierta en algo más importante? La mayoría de las veces nos ponemos corazas para que otros no puedan lastimarnos y eso también le sucede al personaje de Maggie. Al fin y al cabo, ¿quién no tuvo dudas y temores en una relación amorosa?
El film presenta vínculos temáticos con la ópera prima de su director, Edward Zwick, ¿Te Acuerdas de Anoche?, una comedia romántica que data de 1986, protagonizada por Rob Lowe y Demi Moore, donde ambos comenzaban una relación a partir de una noche de sexo y sin intenciones de compromisos pero terminaban enamorándose; allí el toque de humor lo aportaban las intromisiones de los amigos en medio de la pareja mientras que en De Amor y Otras Adicciones toma este rol el hermano de Jamie. Ambos filmes plantean romances realistas que dan un vuelco importante al desarrollarse. Pero Zwick es conocido además por dramas épicos como El Ultimo Samurai, Leyendas de Pasión, Diamante de Sangre y Defiance que, a pesar de tener contenidos más vastos, también profundizaban sobre las relaciones humanas de sus personajes y los conflictos internos de ellos, un punto de unión con su último trabajo cinematográfico.
El personaje de Jamie está basado en el libro de no ficción de Jamie Reidy, Hard Sell: The Evolution of a Viagra Salesman, publicado en 2005, donde un joven y arrogante vendedor de Pfizer narra sus experiencias en la industria farmacéutica de finales de la década del 90. El film está ambientado en 1996, cuando por primera vez los medicamentos se empezaban a comercializar a través de anuncios en revistas y televisión y se vendían directamente a los consumidores. Ubicada en el primer lugar de índices de ventas y publicidad, había una pastillita azul llamada Viagra, la cual se convirtió en un fenómeno que fue oro puro para la compañía que lo comercializaba y para los vendedores que viajaban por el país difundiendo sus virtudes. Si bien hoy en día la pastilla azul es frecuentemente utilizada por la sociedad, en ese momento fue algo revolucionario.
En el film, que no es una adaptación estricta del libro de Reidy, ocurre lo mismo con el personaje de Jake Gyllenhaal, mostrando la tendencia cultural de la época. Inspirado en ese texto, y en medio del mundo de ventas farmacéuticas se desarrolla esta historia de amor. El nuevo trabajo cinematográfico de Zwick no es sólo una comedia, un drama, una historia romántica o una sátira social, sino la suma de todos esos aspectos combinados, impregnado de un humor muy ácido, con situaciones reales y por demás creíbles.