Cuando un personaje es tan rico, ya sea por su personalidad cómo en la historia que le tocó vivir, esto vendría a ser muy apropiado para realizar una película documental, más aun con el carisma que tiene el mítico ilusionista argentino René Lavand. La cuestión es que si a parte del gran registro que se puede conseguir a partir del universo entorno al maestro de los trucos de naipes, hay que decir que con El Gran Simulador, Néstor Frenkel le agrega una particular y virtuosa manera de narración cinematográfica, que hace que los sucesos, a parte de interesantes, sean de lo más llevaderos.
Entre destacados videos de archivo y los entretenidos y reveladores comentarios de Lavand, hacen que esta obra sea de un carácter muy particular, ya que El Gran Simulador lleva al espectador a distintos aspectos de la vida de quién es retratado, desde diversas anécdotas hasta los momentos más agradables de la cotidianeidad del ilusionista, lo que le da un deje sumamente cómico y de complicidad hacia el personaje, para terminar redondeando otro gran trabajo en la filmografía de Frenkel.
Por Tomás Maito