Ma Fille (Mi hija, Argentina, 2007)
Director: Enrique Stavron. Guión: Susana Beltrán, Isabelle Moreau, Michel Agogué y Enrique Stavron. Elenco: Susana Beltrán, Isabelle Moreau, Michel Agogué. Producción: StavronFilms. Edición, Montaje y Sonido: Martín Paniagua. Duración: 72 minutos.
Una dura y maravillosa historia.
Después de más de veinte años sin verse, Susana e Isabelle se reencuentran. Madre e hija respectivamente llevan años aguardando este momento, pero estar frente a frente es más difícil de lo imaginado. Sentimientos, reproches, sueños, preguntas; todo lo que sienten y que se acumulara con el tiempo intenta aflorar.
Nuevamente Stavron (Alegría, El Maravilloso Mundo de Carlitos, La Canción de Ana, entre otras) pone el ojo en la parte más humana y personal de la historia, que gira esta vez en torno al lazo más fuerte que puede unir a dos seres. Para ello se vale de largas escenas en las que al parecer no pasa nada, pero en realidad la tensión del ambiente creado va in crescendo. Tanto el tratamiento en blanco y negro de la película como el trabajo actoral –sumamente corporal- de Beltrán y Moreau son fundamentales: las miradas y gestos de ambas dicen mucho más que las frases entrecortadas que dejan escuchar. La atmósfera que las envuelve es densa, gris, pesada y por momentos las oprime. El trabajo meticuloso y las decisiones acertadas se reflejan en la pantalla. Los premios a mejor película, director y actriz obtenidos en el III Festival de Cine Inusual de Buenos Aires y en el IV Festival Nacional de Cine con Vecinos de Saladillo dan fe de ello.
Stavron suma el color de manera simbólica; no por casualidad es el rojo el que predomina en la escena en donde la alegría y la distensión son las protagonistas. La música, cuidadosamente elegida, ocupa un lugar privilegiado en todo el film. Al igual que los silencios es el elemento que agrega fuerza y sentido a la acción; crea ambiente y marca los distintos grados de tensión. La canción al final de la película parece haber sido creada especialmente para el film.
Con muy pocos recursos, Ma Fille apunta a los sentimientos, despierta la emotividad pero sin quedarse en la lágrima fácil. El director va más allá y desnuda el interior de los personajes; casi imperceptiblemente muestra la complejidad de las relaciones humanas.