Novak (Argentina, 2009)
Dirección: Andres Andreani. Producción: Tourbillon Films. Idea original: Martín Aletta. Elenco: Martín Aletta, Mariela Centurión, Andrés Rasdolsky, Laura Otaola, Daniel Calderón, Maricel Villamonte, Hugo Andreani, Agustina Trimarco, Nicolás Dojman, Andrés Iglesias, Juan Pablo Medina, Martín Piroyansky. Duración: 100 minutos.
Falso documental que intenta reflejar situaciones y sentimientos que genera el BAFICI.
El film transcurre en Capital Federal, entre los dos centros más importantes donde se da a lugar el festival de cine independiente: el Centro Cultural Recoleta y salas del Abasto Shopping, contando la travesía de un director húngaro, Novak, junto a su ángel de la guarda Lucía, encargada de guiarlo durante el festival.
Si bien el film parece presentarse ordenado en días con la duración de una semana, es notable la falta de guión como columna para darle una orientación a este documental cámara en mano, ya que se sumerge en varias oportunidades en situaciones algo forzadas que se salvarían con un dialogo más consistente o que deriven a escenas productivas.
Por otra parte se rescata la idea de revelar ese detrás de escena del festival, aunque por momentos se diluye, no logra su cometido pese a la bien intencionada idea de ambivalencia entre lo real y la ficción.
En Novak se intenta reflejar la fauna que trae consigo el BAFICI, en un escenario de desorganización. Lucía llega a la ciudad y se logra encontrar con el igual despojado director húngaro, que en algunas actuaciones más que extranjero parece extraterrestre. Se une a esta accidentada experiencia el ángel de Bela Tarr, el cual no asiste al evento pero sí proyectan su película. Las actuaciones se ven fruto de la improvisación y en algunos casos resulta efectivo, pero va decayendo hacia el final logrando crear la sensación de que se van esforzando para que el film vuelva a encaminarse.
La película se define como un conocimiento diario, pero se logró el efecto del “irse dando”, que no llega a completar este viaje a ese lugar que ya conocemos. Sin embargo, se destaca esa cámara intrusa en lugares privados con pocos recursos, sostener con la actuación una sensación de realismo que podría ser y la idea de película dentro de otra película.
