Top 10 (Films estrenados comercialmente)
1. 12 Años de Esclavitud (12 Years a Slave): En un contexto dominado por espectadores que suelen consumir gustosos propuestas banales y una crítica mayormente conformista que se asemeja a los exponentes residuales de una lobotomía, 12 Años de Esclavitud (12 Years a Slave, 2013) vino a patear el tablero devolviéndonos ese arte revulsivo y despiadado que analiza tópicos incómodos y furiosamente contemporáneos como la explotación, el sadismo extendido y la pérdida de la identidad. Alejado de la concepción de la “víctima fácil” y jugándose por un protagonista aguerrido, Steve McQueen construyó un ejercicio glorioso en la violencia enunciativa más vivificante y en una evisceración propia del cine de terror, el único con el coraje suficiente para manchar con sangre a los sonámbulos del otro lado de la pantalla, algunos de los cuales en su momento -a pura envidia- lloraron el hecho que desde el mainstream surgiese una obra tan valiente e intensa.
2. El Hombre Duplicado (Enemy): Ya de por sí Maelström (2000), Polytechnique (2009) e Incendies (2010) dejaban en claro que Denis Villeneuve era una de las grandes promesas provenientes de Canadá, pero nada nos podía preparar para el díptico que se guardaba bajo la manga, el que constituiría su debut hollywoodense: La Sospecha (Prisoners, 2013) rankeaba en punta en el top ten del año pasado y El Hombre Duplicado (Enemy, 2013) no se queda atrás en el balance del que termina. Hablamos de una epopeya kafkiana y preciosista que juega con los engranajes del suspenso para desdoblarlos mediante la dialéctica del doppelgänger y los deseos reprimidos, en un vaivén narrativo francamente exquisito en el que Jake Gyllenhaal ratifica un presente laboral muy interesante. Los destellos surrealistas y un lenguaje visual críptico sustentan uno de los estudios más urgentes sobre el matrimonio y/ o la vida en pareja en general.
3. El Gran Hotel Budapest (The Grand Budapest Hotel): ¿Quién hubiese pensado que Wes Anderson, en su adultez, se volcaría hacia el extremo opuesto de lo que suele ser el rumbo estándar de sus colegas a esta altura del devenir profesional? En vez de limitarse a un repliegue centrado en un enfoque nostálgico de sus primeras películas, el norteamericano en sus últimos dos opus ha decidido llevar al terreno de la hipérbole la dimensión barroca y kitsch de su cine, un estrato que si bien siempre estuvo presente, ahora explota con una efusividad y un ardor incomparables. Tanto Un Reino bajo la Luna (Moonrise Kingdom, 2012) como El Gran Hotel Budapest (The Grand Budapest Hotel, 2014) se inspiraron en la organización estilística de Stanley Kubrick y una fotografía efervescente en la línea de Douglas Sirk y la dupla Michael Powell/ Emeric Pressburger. Hoy Anderson nos ofrece un pequeño oasis de creatividad vintage, muy cercano a aquella fascinación humanista del período mudo.
4. El Desconocido del Lago (L’Inconnu du Lac): La obra maestra de Alain Guiraudie es un film minimalista que pone al servicio del contenido los inserts hardcore que muchas películas similares dilapidaron a fuerza de un discurso paupérrimo de raigambre arty. En esencia estamos ante un análisis de la descomposición social de nuestros días a través de una serie de rituales de apareamiento dentro de una comunidad cerrada, un mundo netamente masculino en donde la presencia de las mujeres no pasa de ser un chiste lejano. Yuxtaponiendo un altruismo en decadencia y ese típico hedonismo homicida, El Desconocido del Lago (L’Inconnu du Lac, 2013) toma la arquitectura de las sátiras mordaces a la Claude Chabrol para combinarla con el ascetismo bressoniano y referencias varias a la extraordinaria Cruising (1980), de William Friedkin. La pulsión de muerte y sus oscilaciones narcisistas pocas veces han sido retratadas con tanta eficacia.
5. La Mejor Oferta (La Migliore Offerta): Gracias a otro de esos giros inesperados producto de una carrera por demás errática, Giuseppe Tornatore vuelve a brillar dentro de una constelación cinematográfica que tiende a la uniformización y la previsibilidad más anodina. En la excelente La Mejor Oferta (La Migliore Offerta, 2013), el realizador prácticamente no deja género sin tocar: tenemos suspenso, drama existencial, mucho romance y hasta chispazos esporádicos de fantasía. El desempeño de Geoffrey Rush, aquí interpretando al maravillosamente elitista Virgil Oldman, pone en vergüenza a casi todos sus colegas y lo ratifica como uno de los verdaderos gigantes de la actuación consuetudinaria. La capacidad regeneradora del arte y la voluptuosidad de las emociones humanas son los dos ejes de un convite bellísimo que no sólo nos devuelve al mítico Ennio Morricone en el apartado musical, sino que además se abre camino como un ejemplo de maestría narrativa e integridad ideológica.
6. Escándalo Americano (American Hustle): Indudablemente, Escándalo Americano (American Hustle, 2013) constituye el punto de ebullición de una suerte de neo clasicismo setentoso muy bien entendido, cuyos orígenes se remontan a los dos opus anteriores de David O. Russell, las también prodigiosas El Ganador (The Fighter, 2010) y El Lado Luminoso de la Vida (Silver Linings Playbook, 2012). Este pantallazo naturalista por sobre el ventajismo más mezquino examina los engranajes de la heist movie, la comedia sardónica a la Billy Wilder, el film noir símil Los Sobornados (The Big Heat, 1953), y ese Martin Scorsese que nunca tuvimos, uno centrado en una sensualidad irrefrenable y en figuras femeninas descollantes. Aquí el trío compuesto por Christian Bale, Jennifer Lawrence y Amy Adams -una de las mejores decisiones de casting de las últimas décadas- corre enceguecido detrás de la utopía del ascenso social y sus subproductos.
7. Interestelar (Interstellar): Casi como un contrapeso de la mediocridad y la tibieza del cine hollywoodense contemporáneo, Christopher Nolan se propuso con Interestelar (Interstellar, 2014) la unificación del melodrama y la ciencia ficción apocalíptica, lo que derivó en un combo apasionante que escudriña la frontera entre nuestras relaciones vinculares y la distancia afectiva que reclama el trabajo cotidiano, sea éste mantener la siembra o comandar una expedición a través del universo. El británico condena al olvido a los mamarrachos infantiloides del heroísmo individual y nos retrotrae a exponentes majestuosos de la fantasía especulativa, hoy dentro de un ideario que coloca al empirismo y la sociobiología en el centro de la escena. Respetando la inteligencia del espectador y con una ambición que se condice con sus resultados concretos, el film es un homenaje cariñoso a los que todavía creemos en la capacidad creadora de la ciencia.
8. Primicia Mortal (Nightcrawler): La ópera prima de Dan Gilroy se vale de las pesadillas suburbanas y una paleta de tonos ocres para desarmar a la sociedad del espectáculo, poner en evidencia sus mecanismos más mercenarios y replantear el poder que aún conserva el entretenimiento masivo, hoy por hoy controlado por un mainstream que rapiña el trabajo de hormiga de sus proveedores audiovisuales y sigue modelando conductas con el objetivo de establecer la agenda de un mundo globalizado cada vez más “cándido” e irresponsable a nivel ideológico. Louis Bloom, el personaje de Jake Gyllenhaal en Primicia Mortal (Nightcrawler, 2014), fácilmente puede ser homologado a cualquier inepto que pulula delante o detrás de cámaras en pos de celebridad, dinero o fijar su trascendencia. Así las cosas, una tensión dosificada magistralmente y las sutilezas de la sátira desembocan en un retrato brillante de un sociópata antológico y todo terreno.
9. Un Mundo Conectado (The Zero Theorem): ¡Cuánto se extrañaba el ludismo inconformista de Terry Gilliam, ese diletante de la anarquía cinematográfica! Pasan los años y con cada nueva obra se hace más patente la imposibilidad de un reemplazo, ya que la enorme mayoría de sus colegas no están a la altura y los períodos de silencio son sinónimo de conservadurismo y sequedad artística. El eslabón final de la “trilogía orwelliana”, aquella que comenzó con Brazil (1985) y siguió con Doce Monos (Twelve Monkeys, 1995), es un poema tragicómico acerca de la alienación laboral y los callejones sin salida en que solemos caer a nivel cotidiano. El norteamericano pone en jaque la pretendida omnipresencia del lucro, el control tecnológico en red y la ausencia de una posición crítica para con la mercantilización de las relaciones afectivas: en Un Mundo Conectado (The Zero Theorem, 2013) sobrevuela el fantasma de las religiones mitómanas de antaño.
10. Perdida (Gone Girl): Uno de los grandes tesoros de este año fue la ambivalencia de rasgos esquizoides a la que echa mano David Fincher en Perdida (Gone Girl, 2014), esa especie de epopeya de alcoba reconvertida en parodia contracultural y transmediática. El film lanza sus dardos contra la levedad de las parejas actuales, un público caprichoso e idiotizado y una burguesía intelectual venida a menos, incapaz de aceptar al otro en función de sus diferencias. Este thriller actitudinal, sustentado más en las decisiones de los protagonistas que en la verborragia prototípica del género, recupera esa falta de certezas narrativas que coloca en el ojo de la tormenta a “personas comunes” cuyas vidas paralelas ocultan mucho más que lo que uno podría llegar a imaginar a priori. Mientras el sueño americano continúa cayéndose a pedazos, Fincher relativiza las jerarquías sexuales y disecciona la manipulación doméstica.
Segunda Línea de las Mejores del Año
-Inside Llewyn Davis: Balada de un Hombre Común (Inside Llewyn Davis)
-Ella (Her)
-Dallas Buyers Club: El Club de los Desahuciados (Dallas Buyers Club)
-Nebraska
-Entre sus Manos (Don Jon)
-El Pasado (Le Passé)
-La Ley del más Fuerte (Out of the Furnace)
-El Planeta de los Simios: Confrontación (Dawn of the Planet of the Apes)
Las Rezagadas (o tercera línea encubierta)
-Yo, mi mamá y yo (Les Garçons et Guillaume, à Table!)
-Dos Vidas (Zwei Leben)
-Lore
-Amor a la Carta (Dabba)
-Berberian Sound Studio
-Jersey Boys: Persiguiendo la Música (Jersey Boys)
–Boyhood: Momentos de una Vida (Boyhood)
-Polvo de Estrellas (Maps to the Stars)
Interesantes (pero daban para más…)
-La Increíble Vida de Walter Mitty (The Secret Life of Walter Mitty)
-Betibú
-El Sobreviviente (Lone Survivor)
-Philomena
-Agosto (August: Osage County)
-Relatos Salvajes
-La Esposa Prometida (Lemale et ha’halal)
-Lucy
Peores del Año
-La Vida de Adèle (La Vie d’Adèle)
–El Apocalipsis (Left Behind)
-Oldboy
-Buenos Vecinos (Neighbors)
-Guardianes de la Galaxia (Guardians of the Galaxy)
-Transformers 4
-Las Insoladas
-Tierra de María
Impresentables (o peores del año, parte dos)
-Bañeros 4: Los Rompeolas
-Inactividad Paranormal (A Haunted House 2)
-Luna de Miel en Familia (Blended)
-Muerte en Buenos Aires
-Hijo de Dios (Son of God)
-Tarzán
-Gracias por Compartir (Thanks for Sharing)
–Quiero Matar a mi Jefe 2 (Horrible Bosses 2)
Mejores del Cine de Género
-Torrente 5
-Al Filo del Mañana (Edge of Tomorrow)
-7 Cajas
-Éxodo: Dioses y Reyes (Exodus: Gods and Kings)
-El Hombre más Buscado (A Most Wanted Man)
-Non-Stop: Sin Escalas (Non-Stop)
-Caminando entre Tumbas (A Walk Among the Tombstones)
-La Entrega (The Drop)
El Terror que Tanto Amamos
-Oculus
-Un Pasado Infernal (Haunter)
-Así en la Tierra, como en el Infierno (As Above, So Below)
–REC 4: Apocalipsis
-Nadie Vive (No One Lives)
-Líbranos del Mal (Deliver Us from Evil)
-Apuestas Perversas (Cheap Thrills)
-El Examen (Exam)
Fallidas
-El Lobo de Wall Street (The Wolf of Wall Street)
-Sinsajo: Parte 1 (Mockingjay: Part 1)
-Robocop
-Por un Puñado de Pelos
-300: El Nacimiento de un Imperio (300: Rise of an Empire)
-Transcendence: Identidad Virtual (Transcendence)
-A Million Ways to Die in the West
-Los Indestructibles 3 (The Expendables 3)
Inéditas en Argentina
-Snowpiercer
-Nymphomaniac
-The Double
-Jodorowsky’s Dune
-Under the Skin
-La Danza de la Realidad
-Frank
-The Babadook
Blu Ray/ DVD
-Sólo Dios Perdona (Only God Forgives)
-La Reina Infiel (En Kongelig Affære)
-Cenizas del Pasado (Blue Ruin)
–Predestinación (Predestination)
