Alps (Grecia, 2011, 93´) de Yorgos Lanthimos
El largometraje anterior de Lanthimos, Canino, despertó tanta fascinación como rechazos, es que se trataba de una historia tan bizarra como perversa. Ahora, este representante del nuevo cine griego, refuerza la apuesta y nos ofrece un film igualmente absurdo, pero con un trabajo magnífico y fino de la ironía que pone sobre el tapete varios aspectos problemáticos de la condición humana.
Los Alps es una banda de cuatro personajes que ofrecen un servicio bastante peculiar y llamativo: sustituir la ausencia de seres queridos que han fallecido recientemente. Es decir, ellos actúan, simulan, reemplazan al muerto. Para esto se hace todo un trabajo de investigación para poder identificarse y encarnar al ausente. Claro que como en todo grupo humano los conflictos y traiciones no tardan en llegar.
En medio de toda esta bizzarreada, la película puede hablar y mucho de varios aspectos inquietantes, como es la imposibilidad humana de aceptar la ausencia irreversible producto de la muerte, o una denuncia ácida sobre el sistema del mercado consumista que siempre ofrece un objeto para tapar la falta, este caso sería el extremo de querer reemplazar lo irremplazable.
Sin tener la belleza visual y cinematográfica con la que contaba en Canino, Alps sigue marcando el sello del director griego que siempre da que hablar, pero que nos brinda experiencias incómodas, creativas, entretenidas, con el uso inteligente del humor negro y la profundización de los opresivos vínculos humanos.
