Entre las entrañas y el corazón…
Una pareja se da cita en ocho escenas de una gran carga emocional en la que se ponen en juego sus sentimientos, frustraciones, su entrega al otro y la imposibilidad de esa misma entrega para crear una obra sobre el vértigo del amor y las heridas que lo van destruyendo.
En esta obra abierta de Norman Briski dos actores deben inventar una historia de amor, una relación que en ocho escenas significativas recorra los puntos neurálgicos de la pasión de una pareja. Desde que se conocen Melina y Mauricio descubren el amor y su contracara, el dolor, la separación y la locura en un intento por unir la libertad y el amor sin perderlos en el proceso de asirlos.
La división en ocho escenas que representan tanto vivencias como momentos vitales acontecen en ocho lugares distintos que recorren la sala en un giro de trescientos sesenta grados para abarcar todo el espacio alrededor de los espectadores, que se ubican en el medio de la sala y deben seguir circularmente a los actores como presas ante un depredador que ruge desesperado para comunicar su deseo de ser escuchado y comprendido.
Mahia Corradini Blixen se destaca por su versatilidad y ampulosa emotividad mientras que Lucio Grammatico logra componer un personaje tan inocente y transparente como etéreo. Estanislao Zubiri a su vez, cumple el rol de músico, interpretando por ejemplo el tema Guess I’m a tool, del pianista y compositor de Blues norteamericano, Memphis Slim, para acompañar las escenas pero también aporta una pequeña dosis de ruptura, a veces en clave cómica, a veces con la sobriedad de una efigie, recorriendo el escenario acompañando a los protagonistas.
Ya sea en la primera escena, el bote 23 donde la pareja se conoce casualmente, en la perrera de peluches donde se demuestran su amor, o en el ensayo de Melina, el manicomio, la dirección única, la grabación en la fuente, la entrega de premios o la visita de los jubilados, la obra pasa tanto por la química entre los intérpretes como en la angustia de la falta cuando alguno de los personajes realiza un monólogo con el otro fuera de escena. Las idas y vueltas de la relación se convierten en un camino tan accidentado como la vida misma en esta especie de obra ensayo que busca inventar una pareja, a la vez que analiza el concepto de copla como composición poética para producir un acontecimiento tanto teatral como ideológico en una época tan vacía como hedonista.
Copla es un ejercicio dialéctico sobre lo que surge cuando los opuestos chocan, fundiéndose para separarse y continuar su camino, reanudando un sendero ya recorrido, pero que siempre es nuevo. El amor y el desamor, la libertad y su negación por parte de los anclajes sociales que amarran al sujeto, las neurosis histórico sociales, el encuentro y la partida son algunas de las contradicciones que estallan en esta obra que busca reflexionar sobre nuestra condición de sujetos sociales y las síntesis que surgen de los lazos de afecto representados a partir del desencuentro.
Teatro: Espacio Cultural Urbano – Acevedo 460, CABA.
Funciones: Sábado 19 hs
Entradas: 150 $
Martín Chiavarino
Dramaturgia: Norman Briski. Dirección: Claudio Yañes. Elenco: Mahia Corradini Blixen, Lucio Grammatico. Asistente de Dirección: Piu González Abraham. Asistente de Escenas: Estanislao Zubiri. Vestuario: Mahia Corradini Blixen. Escenografía: Milton Moreira Muzio. Iluminación: Florencia Carboni. Diseño Gráfico: Milagros Figueroa. Fotografía: John London. Música Original: Estanislao Zubiri. Producción y Prensa: Compañía Teatral Sikile.