La Gran Noticia (Les Grandes Ondes, Portugal/ Suiza/ Francia, 2013)
Dirección: Lionel Baier. Guión: Lionel Baier y Julien Bouissoux. Elenco: Valérie Donzelli, Michel Vuillermoz, Patrick Lapp, Francisco Belard, Jean-Stéphane Bron, Paul Riniker. Producción: Pauline Gygax y Max Karli. Distribuidora: Zeta Films. Duración: 85 minutos.
Corriendo por el premio.
La Gran Noticia es una propuesta decente que viene desde Europa y nos brinda una buena comedia retro. La acción transcurre en abril de 1974 durante la Revolución de los Claveles en Portugal, donde miles de revolucionarios lucharon por terminar con el régimen salazarista e instalar una democracia.
Aquí es donde entran en acción los protagonistas, que parecen primos del Inspector Clouseau de La Pantera Rosa, ya que generan casi la misma gracia. Ellos son Bob, un técnico que se está por jubilar y anda en un VW del que no se separa, la feminista Julie, que ansía tener su propio programa, y el reportero de guerra Cauvin, que a su vez posee problemas de memoria. A estos intrépidos periodistas se les sumará el joven Pelé, un adolescente que oficiará de traductor.
La película comienza como una comedia leve centrada en periodistas detrás de una cobertura, sin embargo para los protagonistas hacer un informe acerca de los trabajadores suizos les queda chico y así terminan embarcándose en una aventura que los conducirá a Portugal, donde participarán de la Revolución de los Claveles.
Desde ese momento, el film se transforma en una comedia sátira, donde las persecuciones -con música y baile incluidos- y el sexo se adueñan de los últimos minutos para luego volver a la comedia discreta que comenzó siendo, con un final previsible pero algo triste.
Más allá de toda la gracia y situaciones bizarras que se ven en el film, como la orgia a la que se suman parte de los protagonistas, en suma todo ello funciona como un disfraz, ya que la película retrata la profesión del periodista, la perseverancia por comunicar y lo difícil que es este trabajo, pese a sus detractores. Un buen mensaje que yendo más allá defiende el porfiar grupal en pos de lo que realmente deseamos. Sin duda La Gran Noticia es un film que tiene la duración justa, lo cual hace que no se torne pesado aunque deja con ganas de más.
Por Alan Martínez
Los claveles de la creación.
La caída de la dictadura en Portugal, denominada la “Revolución de los Claveles”, fue el inicio de un período de grandes cambios en las estructuras de los países ibéricos, España y Portugal. Ambos países estaban gobernados por dictaduras de ideología fascista con marcados rasgos políticos de corporativismo estatal y habían prohibido los partidos políticos, enviando a sus dirigentes y militantes a la cárcel, al exilio o al cementerio.
El fracaso de la desgastante y cruenta guerra colonial que Portugal había entablado con Angola, Guinea y Mozambique en los años sesenta había generado un malestar entre muchos oficiales del ejército, especialmente entre los más jóvenes que cada vez se manifestaban más abiertamente en contra de la guerra en un contexto de presión internacional para terminar con la dictadura y realizar elecciones con el fin de entrar como miembro pleno en los organismos internacionales y terminar con el estado de aislamiento político y económico. A su vez, la guerra colonial se había vuelto abiertamente impopular entre los ciudadanos por el costo económico y humano y los movimientos de descolonización eran cada vez más influyentes alrededor del mundo.
El estancamiento de Portugal en materia económica y social en comparación con las democracias capitalistas de Europa era además cada vez más marcado, mientras la censura impedía la libertad de prensa y se denunciaba a la cultura juvenil de los sesenta y setenta como decadencia burguesa desde ideas de derecha cada vez más obsoletas e impopulares.
La Gran Noticia narra de forma satírica las peripecias de un grupo de periodistas radiales suizos que van a Portugal a realizar entrevistas sobre la ayuda económica que Suiza se había comprometido a prestar en materia de infraestructura y conocimiento. Basada en hechos y personajes reales, los periodistas van descubriendo el fracaso y la insuficiencia de la ayuda, encontrándose sin siquiera imaginarlo en medio del golpe de estado militar que derrocó la dictadura del Primer Ministro de la Unión Nacional del llamado Estado Novo, Marcelo Caetano.
La intención de recuperar y homenajear cuarenta años después la experiencia revolucionaria portuguesa en forma de film con tintes cómicos está teñida del optimismo y los recuerdos de aquellos que la vivieron desde la calle y experimentaron el acontecimiento como un cambio en sus vidas a partir de la apertura de una esperanza de cambio político y social hacía una sociedad más libre en todo sentido.
La Gran Noticia no logra expresar en toda su dimensión la importancia del proceso revolucionario, ofreciendo tan solo las consecuencias edulcoradas de los primeros días de uno de los golpes de estado más pacíficos del siglo XX. A pesar de eso, la película se propone ver como un acontecimiento inesperado puede cambiar, al menos por unos días o una noche, la concepción y los prejuicios individuales y los tapujos de una sociedad entera.
Por Martín Chiavarino