La Última Sesión de Freud
Dirección y adaptación: Daniel Veronese. Producción Ejecutiva: Juan Martín Pzelinsky. Dramaturgia: Mark St. Germain basada en la novela “The Question of God” de Dr. Armand M. Nicholl Jr. Vestuario: Laura Singh. Escenografía: Diego Siliano. Iluminación: Marcelo Cuervo. Intérpretes: Luis Machin, Jorge Suárez. Prensa: SMW.
Un Dios Salvaje
Es en los momentos de mayor crisis, de mayor desasosiego, en que la gente se refugia en la fe, en la búsqueda de un ser superior, de un Dios, para buscar las respuestas que no encuentran en el mundo terrenal.Pero para muchos, la existencia de un ser invisible, metafísico, místico que supera la razón, se hace imposible de imaginar. Entonces ¿cómo encuentran estas personas un refugio ante el horror, ante la idea de presunta mortalidad que invade el “alma”, ante la posibilidad de dejar de existir? ¿Qué pasa después de la muerte?
Una eminencia científica, un revolucionario de la medicina del siglo XX como Sigmund Freud se encuentra en una etapa crítica de su vida. Tiene un cáncer terminal en la boca, un paladar artificial que le dificulta la respiración, que le provoca toser constantemente. Se encuentra en un estado enfermizo y solo su hija Anna es la única que lo puede ayudar. Al mismo tiempo, Hitler ya ha invadido Polonia y mandó sus tropas para que bombardeen Londres. No muy lejos de ahí, reside el padre del psicoanalismo. A pesar de la guerra, Freud, reúne fuerzas para enfrentarse con un rival digno de su estatura: el novelista C.S. Lewis, católico devoto, crítico del pensamiento de Freud, escritor de la saga Las Crónicas de Narnia, donde filtró una sutil sátira hacia el hombre que había negado la existencia de un Dios en sus obras, tratando de demostrar su inexistencia a través del uso de la razón.
Se puede interpretar el llamado a Lewis como una suerte de última demostración de sus conceptos, como un pedido de auxilio o incluso como un llamado hacia la extremaunción. Sin embargo, el duelo con Lewis, se convierte en un debate que trasciende lo teológico para concentrarse en la discusión sobre la existencia y el pensamiento humano.
Veronese plantea una obra ágil e inteligente, dinámica, pensada como un juego de ajedrez entre dos intelectuales que se refutan continuamente sus teorías, donde se contradicen los pensamientos de cada uno, y al mismo tiempo se desarrolla una amistad sobre dos personas que creen en el poder del diálogo para solucionar los enfrentamientos, lo que se contradice con el contexto político histórico que se desarrolla más allá del pórtico de la oficina de Freud. Este encuentro imaginario entre dos figuras defensoras de dos posturas opuestas, encuentra en esta obra de St. Germain, una mirada interesante acerca de la existencia o no de un ser superior, de las contradicciones de Freud, de las limitaciones de Lewis.
Cada personaje tiene una construcción meticulosa, que adquiere en las notables interpretaciones de Machin y Suárez una polaridad ideal.
Machin contenido, frío pero sensible y, Suárez, que no solamente debe adoptar un pensamiento demasiado leído y estudiado, sino además una postura física constante, un maquillaje que lo transforma completamente, una voz totalmente distinta a su timbre habitual, y además luchar contra los su rival intelectual y contra la enfermedad del Dr. Sigmund.
Veronese cuida mucha la puesta en escena y pone el peso del texto en las interpretaciones de ambos actores.
El problema es que por momentos, la obra sale en la búsqueda de golpes efectistas. El humor, si bien ayuda a dispersar un poco la tensión que se genera en escena entre los dos personajes, también es previsible y poco inspirado.
Más allá de eso, es un texto inteligente que pretende y logra efectivamente generar reflexión y diálogo, acerca de uno de los grandes misterios de la historia del hombre, y a la vez compartir la genialidad de dos pensamientos opuestos, pero dignos de ser escuchados.
Teatro: Multiteatro – Corrientes 1283
Funciones: Miércoles a Viernes 21 Hs – Sábados y Domingos 20:30 Hs – Sábados 22:30 Hs
Entrada: Desde $160
