Aunque los efectos especiales en el cine son mucho más antiguos de lo que un espectador promedio suele dar crédito, Industrial Light & Magic es sinónimo de ese concepto y es, le pese a quien le pese, una institución de la cultura pop. Fundada en 1975 por George Lucas para posibilitar los efectos especiales de la que sería su obra insigne, Star Wars (Episodio IV, A New Hope, 1977), debido a que los departamentos de efectos especiales de todos los estudios habían cerrado, estuvo detrás de los efectos en películas que van ––aparte de la ya mencionada saga galáctica–– desde la saga Indiana Jones, pasando por Willow, Terminator 2, y llegando al actualmente popular Universo Cinemático Marvel.
Se ha escrito mucho sobre la compañía a lo largo de los años y también se ha rodado bastante; algunos recordamos oír las siglas ILM en varios episodios de la serie Movie Magic, durante la época en que HBO era para todos. Sin embargo, hacía falta un testimonio contado directo desde la fuente, y ese es el ángulo, la novedad si se quiere decir así, que parecería ofrecer el documental en seis episodios Light and Magic.
El principal instinto al ver el documental es que parece ser un making of aggiornado de Star Wars, ya que se cubren detalles biográficos de la vida de George Lucas y cómo nació la historia de Luke Skywalker y compañía. Tampoco es menor el hecho de que quien dirige esta serie no es cualquier gun for hire, sino alguien muy vinculado a la saga, Lawrence Kasdan, guionista de dos de las tres películas originales de la saga, a la cual le otorga un espacio que cubre tres de los seis episodios.
Sin embargo, cabe hacerse la pregunta: ¿Se puede hablar de la fundación de Industrial Light and Magic sin hablar de la creación de Star Wars y, ya que estamos, del mismo George Lucas? La respuesta no es en cuanto sí o no, sino de cuan necesario resulta, y ahí tendríamos que decir: lo suficiente. El documental no indaga en las decisiones de casting, pero sí indaga en las historias de vida que impulsaron a Lucas a querer ser cineasta y contar esta historia de Jedis y Siths. Dicho esto, cabe decir que la suya es la única biografía necesaria; se habla también de las historias de vida de los otros miembros a lo largo de los años. El problema no es la importancia, sino que no se le sabe imprimir el mismo impacto que a la historia de vida de Lucas, y por mucho que puedan apelar estas historias al niño interno del espectador, desembocan en uno de los pocos puntos muertos que tiene la obra: un divague biográfico que no viene a cuento.
Hasta podríamos argumentar que el documental se molesta en construir un arco donde esta compañía no solo fue una necesidad, sino que se trató de un sueño, un sueño que tuvo ramificaciones de enorme influencia para la historia del cine. Por ejemplo, se deja claro que de no ser por la existencia de ILM hoy no tendríamos Pixar.
Si de Pixar hablamos, es necesario remarcar un notorio acierto estructural que consiste en mostrar el paulatino paso de los efectos prácticos a los efectos digitales. La mirada de Kasdan no tiene pruritos en mostrar esto como una transición agridulce, en la que muchos siguieron mientras que otros quedaron en el camino.
Al final del documental queda clara una cosa: si existe tal cosa como un autor en el rubro de los efectos especiales, John Dykstra tiene el mismo peso legendario que John Williams en la música o Vittorio Storaro en la fotografía.
(Estados Unidos, 2022)
Dirección: Lawrence Kasdan. Participa: George Lucas, Dennis Muren, Ron Howard, Phil Tippett, Joe Johnston, James Cameron, Steven Spielberg, Richard Edlund, John Dykstra. Música: James Newton Howard.
