En la Casa de la Cultura de Villa Gesell, durante los pasados 17, 18 y 19 de abril, se llevaron a cabo las Jornadas Argentinas e Internacionales de Cine y Video Independiente, en su edición número 36, a cargo de UNCIPAR (Unión de Cineistas de Paso Reducido), entidad que a su vez forma parte de UNICA (Union Internationale du Cinema et Video). Hablamos de uno de los principales eventos de la región en materia de exhibición de cortometrajes independientes argentinos e internacionales, cuyo nacimiento se remonta a 1979.
Las funciones fueron todas libres y gratuitas y aglutinaron a gran cantidad de público durante el período de Semana Santa. La muestra tuvo dos secciones competitivas centrales y 4 largometrajes invitados.
A continuación repasaremos los cortos fundamentales de la primera jornada, segmentándolos en términos cualitativos y en forma decreciente.
Sección Competitiva Internacional:
-Camionero, de Sebastián Milo – Cuba 29’: EXCELENTE, historia de abuso y venganza bajo el contexto del colectivismo intolerante cubano de la década del 70.
-Cólera, de Aritz Moreno – España 7’: EXCELENTE, corto visceral de discriminación y estupidez social.
-Hotel, de José Luis Alemán – España 11’: MUY BUENO, terror irónico con un diseño de producción símil El Gabinete del Doctor Caligari (Das Cabinet des Dr. Caligari, 1920), de Robert Wiene.
-Entre Ángeles y Demonios, de Pascal Forney – Suiza 8’: BUENO, ciencia ficción mezclada con Woody Allen, muy gracioso.
-Red, de Carlo Guillot y Jorge Jaramillo – Colombia 5’: BUENO, reformulación de Caperucita Roja en clave de animación minimalista y con mucho gore.
-La Banqueta, de Anaïs Pareto Onghena – México 15’: REGULAR, análisis de las diferencias sociales y la frustración personal, con un desarrollo inconducente.
Sección Competitiva Nacional:
-El Beto Fisterra, de Facundo Baldissera 20’: MUY BUENO, homenaje cariñoso a la pasión/ frustración futbolística argentina, con un gran trabajo en producción.
-Perseo, de María Florencia Sosa 11’: MUY BUENO, interesante ejercicio en ciencia ficción mitológica.
-Marionetas, de Brenda Barroero 13’: MUY BUENO, retrato de la vejez con citas al cine mudo, el primer surrealismo y David Lynch.
-Tres, de Iván Iannamico y Juan Flores 17’: MUY BUENO, drama rural con cierta base a la Lucrecia Martel, sabia administración de la tensión acumulada.
-Un Ambiente, PB, sin Luz, de Emiliano Di Giusto 16’: MUY BUENO, crítica ácida a la especulación inmobiliaria y las mentiras cotidianas en pos de una venta veloz.
-El Candidato, de Pablo Polledri 3’: BUENO, parodia política general y sátira sobre la construcción de la imagen de los candidatos en época de elecciones.
-Tenía Tanto Miedo, de Martina López Robol 12’: BUENO, retrato de la androfobia y cierta paranoia femenina llevada al extremo.
-El Año Pasado en Mardelplá, de C.Contratti y S.Korovsky 4’: BUENO, pequeña parodia/ homenaje afectuoso a El Año Pasado en Marienbad (L’Année Dernière à Marienbad, 1961), tomando los diálogos del clásico de Alain Resnais y recontextualizándolos.
-Nuestra Arma es Nuestra Lengua, de Cristian Cartier 15’: REGULAR, rareza de animación con muñecos de trapo, el guión es muy pobre y está centrado en una venganza anodina. Incluye un homenaje final al animé que dilapida el desarrollo previo.
-De Cómo Hipólito Vázquez Encontró Magia Donde no Buscaba, de Matías Rubio 15’: MALO, intento fallido de grotesco criollo familiar, modelo décadas de los 70 y 80.
-Andén, de Tatiana Maranca 13’: MALO, humanismo a la François Truffaut pero con un esquema narrativo muy deficiente.
La película invitada de la primera jornada fue Blues de los Plomos (2013), de Gabriel Patrono y Pablo Soria, un documental muy interesante sobre un tópico hasta ahora no trabajado en el campo del rock, el mundo de los asistentes polirubro y sus múltiples tribulaciones (traslado de equipos, armado del escenario, afinación de instrumentos, apoyo/ auxilio para determinados músicos, control general del show, etc.). Centrándose principalmente en Jota, encargado de escenario de Almafuerte, y Aníbal “La Vieja” Barrios, asistente durante 34 años de Luis Alberto Spinetta, el film analiza el proceso de profesionalización paulatina desde los 90 hasta la actualidad y narra el géneris de la mítica Canción de los Plomos de Oveja Negra, banda conformada por colaboradores históricos de la primera y segunda camada del rock nacional (Litto Nebbia, León Gieco, Charly García, entre otros). MUY BUENA.
Por Emiliano Fernández