Miércoles 17 de mayo.
Desde los comunicados de prensa del Festival de Cannes -que este año festeja su 70 aniversario- se auguran actividades especiales y cambios en comparación con ediciones previas. Una de ellas es la edición impresa de Ces Annees-la, con motivo del aniversario del festival. Será una publicación con relatos de sesenta periodistas franceses e internacionales; agasajos a prensa en el primer día de transcurso del festival en una fiesta de bienvenida, y a su vez, otras medidas no comunicadas que tienen que ver con la seguridad como la estricta revisación personal antes de entrar a salas, la incorporación de sistemas de detección de drones y el armamento del servicio policial.
Conferencia del jurado
El festival inició con la conferencia de prensa del jurado, que este año tiene como presidente al director español Pedro Almodóvar. Junto a él, los actores Jessica Chastain, Fan Bingbing, Will Smith y Agnés Jaoui, el compositor Gabriel Yared, y los directores Paolo Sorrentino, Maren Ade y Chan-wook Park.
El momento más efusivo de la conferencia aconteció al abordar la actual controversia sobre Netflix y los films producidos que se presentan este año y no estrenan en salas, tópico que obligó al festival a imponer nuevas reglas para su próxima edición. Días atrás, el director coreano Bong Joon Ho había aclarado su posición: su film Okja está presente en la Competencia Oficial y él argumentó por qué da una bienvenida al medio de streaming que ahora produce films. Ya en la edición 69 del festival, había captado la atención el creciente porcentaje de films presentados que habían sido producidos por compañías como Amazon o Netflix.
Por su lado, Almódovar constató que el cine ha tomado distintas formas y tecnologías que hay que aceptar. Personalmente, destacó que los films no deben considerarse ser parte de un mobiliario sino verse de tal manera y tamaño de pantalla que permita que el espectador se zambulla en una historia cinematográfica.
Novedades
En el mercado que acontece paralelo al festival, se exhibieron para compradores, Salty, nuevo film de Simon West, protagonizado por Antonio Banderas y Olga Kurylenko; Spoor, de Agnieszka Holland, y Logan Lucky, de Steven Soderbergh.
Resultó una noticia de relevancia conocer en la primera página de la publicación Screen Daily, que Ricardo Darín se unió al proyecto del director iraní Asghar Farhadi, reciente ganador del Oscar por El Viajante (The Salesman, 2016). También están unidos al proyecto Penélope Cruz y Javier Bardem, ya que el film contará con la peculiaridad de ser hablado en español.
La empresa mk2 se une a la venta del último film del director rumano Corneliu Porumboiu, Gomera.
Por su lado, la estructura de ventas de la Rai anunció que el último film de Matteo Garrone, Dogman, se encuentra en estado de preproducción.
Apertura
El film que abrió el festival en calidad de fuera de competencia fue Les Fantómes D’Ismael, del director francés Arnaud Desplechin, con una tibia recepción, seguida de la función de prensa de la primera película en competencia, Nelyubov (Loveless), del ruso Andrev Zvyagintsev.
José Luis De Lorenzo
Les Fantómes D’Ismael, de Arnaud Desplechin (Francia, 2017 – Fuera de Competencia), por Damián Hoffman
La película elegida para abrir la edición número 70 del Festival de cine de Cannes fue Les Fantómes D’Ismael, de Arnaud Desplechin, fuera de competencia. La decisión seguramente no fue casual: es una producción francesa, local, una historia que habla en parte sobre el cine, con gran despliegue técnico y con un elenco que conoce bien la alfombra roja de la Sala Lumiére.
La narración no es sencilla: mezcla dos historias, una ficticia y otra en un plano real. Por un lado, el protagonista (un genial Mathieu Almaric) intenta idear y concretar su próxima película, un thriller sobre espías. Mientras, en su vida privada le pasan cosas más extrañas que en su propio guión. Su esposa Carlotta (Marion Cotillard), que un día lo había dejado para nunca más volver, reaparece 20 años después. Todos la creían muerta, incluso su padre. Esta sorpresa desestabiliza la relación que tiene con su actual pareja, Sylvia (Charlotte Gainsbourg).
La película se destaca por mezclar diferentes estilos de narración y de edición. Cambia todo el tiempo. Incluso en algunos momentos parece que se anima al género del documental. En la mayoría de los momentos, la velocidad es frenética, los cortes constantes, pero en algunos tramos se toma el tiempo para profundizar en algunos vínculos, sobre todo en los dramáticos o los relacionados con las crisis en las parejas.
En la mayor parte de los casos acierta. En otros, confunde y saca el foco de la narración, que ya tiene muchas idas y vueltas. El ritmo por momento es similar a El Primer Día del Resto de Nuestras Vidas (Un conte de Noël, 2007), la comedia que Desplechin estrenó hace 10 años.
El arranque puso en los paladares de los espectadores un gusto conocido y eficiente en la Costa Azul de Francia. Cine francés contemporáneo con grandes exponentes de la industria de este país, algo que seguramente se repita en las próximas semanas con más producciones regionales.