Nada de teatritos para la gran Tita Merello
Virginia Innocenti y su espectáculo Dijeron de Mi se ha mudado. No se preocupen, no se fue de gira ni muy lejos que digamos. Pasaron del Maipo Kabaret, una suerte de segundo piso, hijo menor del legendario teatro de la Avenida Esmeralda, al Gran Maipo, donde alguna vez, la gran Tita deslumbrara al público.
Dicho re estreno tuvo lugar el jueves 6 de enero y contó con el glamour de las mejores épocas del teatro nacional. Más allá de los artistas invitados, el Maipo se vistió de lujo ante un espectáculo que realmente merece todos los elogios ya recibidos.
Realmente, no puedo agregar más palabras a la crítica original de María Eugenia D’Alessio que de por sí, figura en la marquesina externa del Teatro Maipo, lo cuál demuestra, lo lejos que hemos llegado como sitio web, y el orgullo que sentimos de tener en nuestro staff a una cronista que aparece en uno de los teatros más prestigiosos y deslumbrantes de Buenos Aires.
Más allá de este aspecto, la obra o espectáculo en sí es realmente admirable por una sola razón: Virginia Innocenti. La progresiva metamorfosis que realiza la actriz hasta convertirse en la gran Tita, sin perder la esencia Innocenti es maravillosa. Aun cuando genera enorme tristeza recordar la soledad y la falta de un único amor que la acompañe durante su vida, su dura infancia, sus difíciles comienzos, Innocenti recuerda a la Merello como una artista única, singular, verborrágica, divertida, transgresora, que supera a la figura pública que todos conocían. Es un retrato intimista lleno de anécdotas que contienen una gran complicidad con el público porteño (la historia con Cafiero solamente vale el precio de la entrada), donde uno de los puntos fuertes está en el reconocimiento de que ni Tita ni Virginia, quizás cuentan con una voz prodigiosa, pero que su fuerte, en realidad es la actitud, la simpatía, gracia, honestidad, humor y fuerza para establecer una relación con el espectador, para enfrentar ellas solas al público en un escenario gigantesco como es el del Maipo.
Y si Tita se la aguantó, Virginia también puede. Con los emblemáticos temas musicales que caracterizaron a la artista, acompañados con genuina personalidad por el maestro Diego Vila y una adecuada puesta de luces, excelente diseño de vestuario a cargo de Pablo Battaglia y Mónica Mendoza, y una escenografía minimalista que quizás queda un poco relegada en el enorme escenario, pero seguramente se adecuaba más al escenario del segundo piso, Dijeron de Mi, es un verdadero lujo de la calle Corrientes (o el centro mejor dicho).
Un emotivo homenaje a la gran Tita Merello que no tiene desperdicio y que peca de ser demasiado corto, acaso, pero cada uno de los 70 minutos que dura el espectáculo es 100 % disfrutable.
El resto ya lo dijo María Eugenia en el siguiente link:
http://www.asalallenaonline.com.ar/teatro/criticas/1304-dijeron-de-mi.html
Porque los argentinos, tenemos a Tita y el tango en la sangre, Dijeron de Mi, se convertirá en un clásico de la cartelera porteña.
Teatro: Maipo – Esmeralda 443
Reservas: 4322-4882/8238
Funciones: Jueves, Viernes y Sábados 21 Hs. Domingos 20 Hs
Entrada: $70