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DOSSIER

El Cisne Negro Vs. Las Zapatillas Rojas

Existe una categorización, sin constituir específicamente un género: los films sobre ballet. Sin referirnos a aquellos donde el ballet es filmado, recreado para ser vivido tal cual en escenario. La pauta aquí marcada es sobre aquellos films que van detrás de bambalinas, retratando las vidas de aquellos vinculados a la vida del ballet, el ballet y la vida, ¡qué dos palabras que resuenan tanto en éstos dos films! El Cisne Negro, de Darren Aronofsky y Las Zapatillas Rojas, de Michael Powell y Emeric Pressburger. Dos films que “no tratan sobre ballet”.

Las Zapatillas Rojas, basada en el cuento de Hans Christian Andersen, retrataba a la bailarina Vicky Page, interpretada por la pelirroja Moira Shearer, una mujer en búsqueda de una identidad, quien descubre en la danza las zapatillas que le impiden dejar de bailar, tanto en escena como en la vida misma. El Cisne Negro está interpretada por Natalie Portman en el rol de Nina Sayers, una joven confinada, virginal, sobreprotegida por una madre particular.

Vicky y Nina tienen una vida atormentada, sus mentores son demandantes, las presiones son siempre crecientes, son profesionales perfeccionistas: no quieren quedarse afuera de sus metas inclusive dejando todo de lado por alcanzar el objetivo tan preciado, seguir bailando, alcanzar el rol principal de una obra de ballet. Son bailarinas que conviven con personajes tortuosos, quienes a su vez generan que sus vidas se tornen aún más difíciles.

Desde distintos ambitos, Vicky es presionada por su esposo, un idealista compositor, a quien deja por seguir con su profesión. Nina lo es por su madre, quien la trata como niña, sobreprotege y ve en ella un ejemplo de todo lo que no pudo lograr en su vida, léase llegar a ser una bailarina exitosa. Ambas constituyen personajes que rondan lo extremo. Hay un objetivo en ambos personajes principales que pone en balanza la profesión versus la vida misma. Dejar la vida por el arte, abandonar un amor, la existencia del ego del artista, un mundo adictivo por el cual te volvés obsesivo.

La búsqueda de identidad da paso a la insanidad.

Sobre recursos cinematográficos, las coreografías en Las Zapatillas Rojas son más auténticas, presentan actos casi completos, coloridos, gran conjunción entre diseñadores de set y operadores de cámara, auténticas muestras de lo que involucra un ensayo; en El Cisne Negro la coreografía es apenas funcional al relato con salvedad del acto final, ni siquiera completo, con fragmentos y sub plot mediante.

El Cisne Negro tiene una sobreutilización de espejos, según algunas fuentes comparable a la de La Dama de Shanghai, para la demostración de las diferentes personalidades de la protagonista.

El color. Si bien Las Zapatillas Rojas está filmada en Technicolor, y quiso traer a colación todo instrumento pictórico al respecto, inclusive desde el notable vestuario, en El Cisne Negro no existe colorido, todo es blanco o negro… y rojo.

Jack Cardiff, legendario director de fotografía, reconocido por su empleo de la luz y el color, fue consultado por Powell sobre si alguna vez había asistido a un ballet, obteniendo un “no” como respuesta. Powell entonces le dijo “el próximo film que haremos será vinculado al ballet, y deberás aprender todo lo que puedas sobre él”. El resultado fue asombroso, se combinaron distintas capas: en el film conviven los colores opuestos en una misma escena, los efectos de iluminación, la utilización de pinturas mate y la sobreposición de negativos.

El primer vestigio de homenaje que visualizamos en El Cisne Negro, un recurso cinematográfico ya utilizado por Martin Scorsese (quien siempre destaca en entrevistas que el film de Powell y Pressburger es su favorito) en su film El Toro Salvaje, es la inclusión del movimiento de cámara horizontal a alta velocidad, cual una vuelta, así la cámara toma la posición de los ojos del protagonista. En el caso de El Cisne Negro y Las Zapatillas Rojas, ese giro corresponde a una vuelta de ballet o varias, para ver a través de los ojos de la bailarina, en El Toro Salvaje esa vuelta no correspondía más que a la de un golpe recibido. No podemos pasar por alto otro homenaje que destaca Thelma Schoonmaker, viuda de Powell y reconocida montajista por sus colaboraciones con Scorsese, en extras de la excelente edición lanzada en formato Blu Ray por el sello Criterion: Scorsese, quien fuera partícipe del encargo de restauración de Las Zapatillas Rojas, exhibida en el Festival de Cannes de 2009, en La Isla Siniestra incluyó un nuevo homenaje en la escena donde Leonardo DiCaprio baja por una escalera de caracol, allí la disposición de sus pies son similares a los de Vicky sobre el final de Las Zapatillas Rojas.

¿Por qué querés bailar?

¿Por qué querés vivir?

 

Por José Luis De Lorenzo

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